Pláticas-De-Vidas

Por: Claudia Rosales.

Lo llamo “UN” (abecedario) porque puede ser uno de tantos… pero este lo comparto porque lo he elaborado desde la digestión propia de aquellas situaciones que merecen reinventarse, resurgir, rehacerse, sanarse y hasta resanarse…

• ACEPTAR, por difícil que sea una situación, que estamos en medio de ella y que no hay regreso ni adelanto.
• BALANCEAR, lo que se tiene y lo que se perdió.  Partir siempre desde agradecer por lo que nos rodea y nos fortalece para después tirarse a un mar de llanto por lo que se ha perdido; pero –insisto- desde la gratitud.
• CORTAR, con eso que lastima, que lacera, que desvanece y que quebranta la tranquilidad. Y aquí me voy a colar con “CANTAR”. Cantar a rompe y rasga, con o sin tequila.
• DIRIGIR la energía hacia adentro.  NO esforzarse en salir de un agujero sin antes conocer la profundidad del mismo.  Viajar hacia adentro es una de las herramientas más poderosas para escalar a la luz.
• EMPEZAR, una y otra y otra y mil veces… ¡cuántas sean necesarias! No nacimos con límite de caídas.
• FLORECER y reconocer que estamos hechos de un aroma único, de un tallo que se rompe pero que logra, a pesar de las adversidades… abrir pétalos capaces de convertir las lágrimas en gotas de rocío,  (y lo dije cantando a Silvio)
• GOZAR el más mínimo de los detalles y los logros que sentimos. Pueden ser pequeños, pero en realidad están formando peldaños firmes. 
• HONRAR el aprendizaje y al maestro; que aunque a veces hay verdugos, la enseñanza viene acompañada de agradecer la lección.
• IGNORAR los comentarios negativos, las compañías asfixiantes y los dedos acusadores.
• JUNTAR los pedacitos rotos, pegarlos y ubicarlos en el lugar correcto… ninguna cicatriz es en vano.
• LIMPIAR el terreno (el alma) para comenzar de nuevo.
• LLORAR hasta vaciarse, hasta que no salga una lágrima más, hasta quedar afónicos. Llorar, libera.
• MORDER almohadas primero, luego manzanas y frutas dignas de arrancarse con fuerza; después nueces, almendras, bombones y por supuesto: chocolates.
• NAVEGAR conforme a la corriente pero de vez en cuando, jugarle al salmón.
• OSAR y atreverse a buscar nuevas rutas, poner los huevos en diferentes canastas y apostarle a todo: Salidas, terapia psicológica, reuniones y confesiones con amig@s, abrazos y sollozos, aromaterapia, flores de Bach, una buena copa de vino, lecturas… ¡Lo que sea! Todo abona.  Sumar, sumar, sumar.
• PELLIZCAR,  pellizcarse es infalible para sabernos en esta dimensión.  Pero podemos extenderlo a pellizcarle a un pastel, a un proyecto… así, de “a poquito” hasta que vayamos adquiriendo confianza y dominemos el terreno.
• QUERER.  Querernos, amarnos, querer lograr, querer hacer, querer lo que nos hace sonreír, querer eso que nos quita el dolor de panza.  Abrazarse, moverse, ejercitarse. Querer dormir, querer soñar, querer sanar.  QUERER es una herramienta  INDISPENSABLE y una fuerza INFALIBLE.
• RESURGIR, aunque sea haciendo burbujas y con los cachetes inflados por tanto sostener el aire y el aliento.
• SOLTAR lo que duele, lo que resta, lo que divide, lo que no tiene mejora.  Soltar es el pase automático para SANAR.

Reconocer y reconocerse, no es cuestión de un día.  Es tarea de a “de veras”

Estas líneas las dedico a mis grandes maestr@s en la vida:

A mis amig@s, que han resurgido y sanado a base de una entereza basada en el amor y un trabajo pleno de conciencia.

A mis amig@s que ahora sufren y tienen en sus manos un maravilloso reto consigo mism@s.

A mis verdugos, porque lejos de romperme… me he fortalecido y me reconozco como un Ser en un camino de aprendizaje constante, en búsqueda de armonía y amor.

A mis padres, que con su ejemplo me han demostrado que ante las acciones, las palabras salen sobrando.

A mis hijos, que son la representación más fidedigna que conozco de resiliencia y el amor de mis amores (también lo escribí cantando)

A mis hermanas, que siguen en sus propios abecedarios.

A mi esposo, que es mi fuente de inspiración diaria.

A las miles de canciones que canto día a día.

Ps.1.  En medio de todo un desmadre, hasta un grito de lamento, representa un escape.

Ps.2. Si comen chocolates, no abusen porque luego el reto es otro…

Ps.3. Nadie ha dicho “fácil” y como digo a cada rato: La vida no es justa… ¡para nada! Pero es muy bella.

Ps.4. Cada quien tiene su propio camino, abecedario y semi abecedario.

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-