Por: Perfecto Lara Rodríguez.

El cerebro es el órgano más importante del cuerpo humano; cuidarlo es vital para nuestra salud. Si padecemos de pérdida de la memoria, dolor de cabeza, migrañas, traumatismo cerebral, trombosis cerebral, accidente cerebrovascular, tumor cerebral, etc.; ello significa que hemos descuidado lo principal; que hemos permitido o propiciado daños al órgano que rige nuestras vidas.  

Si el cerebro es el órgano primordial del organismo, el mejor protegido por una cubierta ósea que lo resguarda de cualquier daño; todos debemos también hacer lo mismo, proteger nuestro yo soy de cualquier quebranto. ¿Pero, qué es el yo soy?

El yo soy es fruto del reconocimiento que hagas de tus emociones y del flujo de tus inquietudes; es también consecuencia de la elección consciente de tus creencias y valores. Todo ello te conduce a la percepción de tu identidad; al conocimiento de tu propia esencia; y a enfocarte con mayor claridad a la manifestación de tu ser y su realidad.  

Recordemos que somos fruto de nuestras capacidades y circunstancias.

Que nadie es más que nadie. Y por más adversas que parezcan nuestras realidades, estamos dotados de capacidades, potencialidades y talentos que nos permiten adquirir las herramientas necesarias para transformar nuestras circunstancias, en pos de nuestro bien, y el bien de los demás.   

Quien no protege su “Yo soy” de cualquier daño, se olvida de su esencia y se deja convencer tratando de convertirse en lo que los demás esperan de él. Entonces se siente infeliz porque no sabe quién es verdaderamente.

Por otro lado, identidad e inmunidad van de la mano. Es decir, quien tiene una pobre identidad consecuentemente tendrá carencias inmunitarias y será de naturaleza enfermiza. Trucha. Quien, por el contrario, se siente orgulloso de su origen y satisfecho de sus logros, tendrá un sistema inmunitario poderoso que lo preserve de padecimientos.

Quizás hubo un tiempo en que no sufrías mucho por no ser tú mismo; pero ahora las migrañas, la pérdida de la memoria, te están avisando que esto no es bueno para ti; que es hora de cuidar tu cerebro para evitarle daños mayores: Aneurismas, trombosis cerebrales, etc. Ha llegado el momento de contactar con lo que eres realmente; y que construyas tu vida en consecuencia.

¿Cómo hacerlo?

El cerebro requiere para su funcionamiento básico tan sólo de dos sustancias oxígeno y glucosa. Sin embargo, las vitaminas del grupo B y los ácidos grasos insaturados; Omega 3 y 6; son los nutrientes que más influyen en el desarrollo del pensamiento, la memoria, y el autocontrol. Específicamente, para mejorar la memoria y otras facultades cerebrales, ayudan mucho el Ginkgo biloba; Árnica, Arándano y Alga espirulina.

Por el contrario, el consumo excesivo de azúcar y de aditivos, las bebidas alcohólicas y estimulantes, té y café; así como los colorantes afectan al sistema nervioso y alteran el comportamiento.

En la otra vertiente, todo problema en el cerebro puede tratarse de incapacidad intelectual para afrontar una dificultad; e indica un problema en el nivel del yo soy. La persona afectada a nivel cerebral está recibiendo el mensaje de que tiene que proteger su yo soy de cualquier daño.

Si tu cerebro es el órgano que dirige el resto de tu cuerpo, tu yo soy debe dominar tu vida. El cerebro representa el ordenador. Tu yo soy, el software en ejecución. Tu yo soy es dinámico, plástico, autosustentable. Tu cerebro procesa tu realidad de conformidad con los programas que tu yo soy instale en él; o que desinstale, si ya le resultan disfuncionales.

Así es que, para evitar deterioro de las neuronas cerebrales, además que no le falten oxígeno y los nutrientes indispensables, es necesario empezar a cambiar las viejas pautas. Soltar los remordimientos. Curar las viejas heridas y ya no seguir alimentándolas. A la par, nuestra memoria mejora si buscamos enfrentar, resolver y asimilar la realidad circundante.

Conviene repetir cada mañana: “Soy el afectuoso ordenador de mi mente. Me resulta fácil reprogramarlo. Toda la vida es cambio y mi mente es siempre nueva. Con amor libero el pasado y vuelvo mi atención a este nuevo día. Todo está bien”.  

Es cuánto.

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Dr. Perfecto Lara Rodríguez. Ex Presidente Municipal del X Ayuntamiento de Tecate, B.C. (1977-1980), primer diputado por el séptimo distrito local en la XI legislatura estatal de B.C. (1983-1986), actualmente es maestro jubilado y cuenta con estudios de licenciatura en Ciencias Biológicas, Maestría en Psicoterapia Médica, postgrado en Hipnoterapia clínica, y Diplomado en diversas terapias de medicina alternativa: Acupuntura, Herbolaria, Biomagnetismo, Radiónica, Electroemoción y Bioneuroemoción.

Cel. 686 1829045, Facebook: Perfecto Lara Rodríguez.

 *LAS OPINIONES DEL AUTOR NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA*