Por el Psic. Felipe Aguilera Calleros.

Cuando sentimos que no rendimos lo necesario para lograr determinadas actividades en distintas tareas en nuestra vida, nos vemos rebasados por las exigencias que nos imponen o nos autoimponemos, y así desarrollamos estrés.

Este estrés puede llegar a provocar complicaciones tanto a nivel físico (problemas cardiacos) como psicológico (ansiedad, depresión, etc.).

El estrés puede llegar a ser positivo cuando quien lo padece considera que la situación le puede proporcionar beneficios, motivándose y movilizando su energía para lograr la tarea, por ejemplo alguna competencia deportiva.

Pero el estrés negativo que resulta de anticipar resultados no gratificantes de determinada situación, puede llegar incluso a paralizarnos por completo. Cuando algo así nos ocurre es recomendable recurrir a un experto, sin embargo a continuación dejaremos unos breves consejos que pueden ser de utilidad si tenemos la intención de reducir nuestros niveles de estrés.

La mala organización del tiempo, o mejor dicho la escasa gestión de él, es una de las principales causas de estrés, influyen de la misma forma el dejar pendientes actividades como lo son tareas, estudiar a última hora para un examen, etc.  Organizar adecuadamente nuestro tiempo es la mejor forma de prevenir el estrés.

Si acostumbrarnos exigirnos demasiado, aunque podría en principio parecer positivo, realmente nos trae consecuencias negativas, aumentando la tensión y angustia, además de no disfrutar los logros que pudiéramos llegar a alcanzar. Evita ser tan perfeccionista.

Cuida tu salud, el estrés puede llegar a hacernos cambiar ciertos hábitos de nuestra vida, sobre todo los que son saludables; lo cual a su vez nos predispone a no contar con las herramientas para afrontarlo.

El ejercicio físico  incrementa la producción de neurotransmisores en nuestro cerebro que moderan la respuesta al estrés y mejoran el estado de ánimo.

Apóyate del buen humor, reírse trae beneficios tanto a nivel físico como mental, ayuda  aliviar tensiones y manejar de una mejor forma las situaciones estresantes.

El estrés provoca problemas de sueño, y los problemas de sueño provocan estrés, dormir adecuadamente es necesario  para que la mente, y el cuerpo, puedan descansar y recuperarse. Cuida los horarios y el ambiente para dormir, además de lo que comes y bebes antes de irte a descansar.

“El estrés acumulado solamente nos complicará la vida”

¡Nos vemos en la próxima publicación!

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-