Pláticas-De-Vidas

Por: Claudia Rosales

Hace unas semanas en Mexicali, fue víctima de un atentado, el abogado penalista Lic. Cuauhtémoc Castilla Gracia.

Acto cobarde donde afuera de su despacho fue sorprendido a disparos.

Quienes lo conocemos, sabemos de su carrera y desempeño como penalista y victimólogo.

Un abogado que se “ha puesto la camiseta” con las familias que han perdido a un ser querido por homicidio y uno de los pocos que se ha subido al ruedo en búsqueda de respuestas por los casos de feminicidio.

Esto, deja un mensaje claro para una comunidad que se ha visto rebasada por el crimen y donde los pocos comprometidos con el esclarecimiento y que están en contra de la impunidad, suelen ser perseguidos, acosados, amenazados y en muchos casos asesinados o desaparecidos.

”Témoc” que es como lo conocen sus amigos y familiares, llevaba amenazas a cuestas por representar dos casos muy sonados en la localidad.  Uno por feminicidio y otro más por homicidio. En su carrera profesional, se ha desempeñado en varios cargos públicos y actualmente litiga en su despacho de manera independiente.

Pero, ¿qué hay detrás del traje, la corbata y los expedientes?

Originario de Mexicali, se sintió motivado a estudiar derecho al ver las injusticias que había en la sociedad. Fue un joven idealista que se daba cuenta de la cantidad de personas que eran sentenciadas injustamente y sobre todo, veía cómo a las víctimas no “se les hacía caso”.

Antes de compartir con ustedes la charla que tuvimos, les cuento que a semanas del atentado, vi al “lic” de vuelta en su despacho con un ánimo e ímpetu poco comunes para alguien que se “salvó de milagro” -dicho por él mismo-

Sobre todas las cosas que me platicó, resalta una que me puso “la piel de gallina”:

“Mi madre, que en paz descanse, me regaló una medalla con una cadena.  Cuando comenzaron los disparos yo me tiré al suelo en automático, no me había dado cuenta de que ya me había entrado una bala. Estando en el suelo, seguía escuchando los disparos y de repente me di cuenta que tenía sangre en el cuello.  Cuando cesaron los tiros, me levantaron, me subieron al carro y me llevaron al hospital.  Iba consciente.  Me intervinieron y vieron que la bala traía trayectoria.

¿Qué me salvó?  La cadena que me había dado mi madre.  Al parecer la bala se desvió y no penetró la yugular; la cadena se rompió.  Claudia, yo cuando estaba en el piso sentí que mi madre me abrazaba”

¡Ahora sí! Habiéndoles extendido mi estremecimiento en el corazón, les comparto:

  • Licenciado, ¿Cómo se siente litigando a comparación de ser funcionario?
  • “Como litigante, como asesor jurídico, me siento mucho mejor. Para mí es una satisfacción poder ayudar a la gente que más lo necesita. Es una satisfacción muy grande cuando logro mi cometido, y logro ayudar a las víctimas.  Generalmente defendemos víctimas de violencia de género en todos los sentidos: Violencia intrafamiliar, lesiones calificadas, homicidio calificado, feminicidio, etc.  Tanto las víctimas directas como las víctimas indirectas, que vienen siendo los familiares
  • ¿Qué representa para Usted, haber sobrevivido a este atentado?
  • “Bueno, para mí haber sobrevivido es algo muy, muy duro. Es una nueva oportunidad de vida, es mejorar mi forma de ver las cosas, valorar lo que tengo, darme cuenta quién está cerca y quién está lejos de mí; es darme cuenta de quién me quiere y quién no me quiere.  Entender que soy un humano como cualquier persona que comete errores, que no soy perfecto.  Tratar de corregir lo malo, tratar de superarme y hacer lo que me ha faltado por hacer; vivir cada día con más intensidad.  ¡Vivir echándole todas las ganas del mundo!
  • ¿Se considera víctima o no?
  • “Considero que fui víctima de un hecho, pero eso no me ha bajado…no me ha minimizado. Cuando yo veo una víctima no lo veo como alguien débil; veo a alguien que sufre a consecuencia de un hecho criminal por parte de un particular o de la autoridad.  Como víctima NO ME SIENTO DEBILITADO.  Me siento que sufrí algo y que fue una experiencia fuerte; muy dolorosa para mí y para mi familia. Sin embargo, no siento que esto vaya a actuar en mi contra, ni que me haya minimizado o debilitado; al contrario creo que me hizo más fuerte.  Y obviamente, me dio más empatía con las personas que represento porque ahora, prácticamente estoy en los zapatos de ell@s y sé lo que ha sufrido una persona que padecido un hecho parecido o igual al mío“.
  • ¿A quién admira?
  • “Principalmente, a mi padre. Es la persona que más admiro en la vida.  Admiro a César Bonesana, a Francesco Carrara; admiro a los grandes juristas de la humanidad, admiro a Benito Juárez“.
  • ¿Qué libros le gustan?
  • “He leído libros de John Le Carré, John Grisham.  Me gusta mucho leer libros y ver películas de abogados.  Me encanta ver la pasión que ponen para defender a su cliente, ya sea víctima o acusado ¡eso me fascina!
  • ¿Qué cambios haría en la ley?
  • “Yo modificaría la percepción que se tiene de la víctima  y la protección que se le da a la víctima; creo que no tenemos un sistema realmente cautelar para protegerla, creo que la víctima verdaderamente esta desprotegida, salvo que ha mejorado la participación de la misma en el proceso.  Antes era nula la intervención de la víctima en el proceso, nada más se sabía o escuchaba de la víctima en la resolución o sentencia, en la parte relativa a la reparación del daño. Nada más se conocía en eso, pero actualmente ya existe una intervención directa por parte de la víctima y en el proceso ya esta representada por un abogado o asesor jurídico, pudiendo interponer recursos.  Sin embargo, sí hace falta un sistema eficiente de cautela para su protección
  • ¿Qué espera del aparato legislativo y del judicial?
  • “Yo considero que el ser diputado debiera ser un puesto honorifico.  No debiera de haber ingresos, no debiera haber honorarios para el diputado, como en otras partes del mundo.  Como en Europa, donde el diputado trabaja en la mañana como carnicero o como bombero – por mencionar algún oficio-  y por las tardes pues “agarran” dos o tres horas para legislar, pero VERDADERAMENTE para hacer leyes que ayuden a la sociedad.  Creo que actualmente el poder legislativo está coaptado por la ambición y por la avaricia de los partidos que los dirigen y además de los intereses que circulan en torno a él o ella. Considero yo, que debe cambiarse primero que nada, la figura del diputado o legislador y debe ser una figura cien por ciento honorífica; obviamente nada más pagar sus gastos y todo lo que lleve la tarea legislativa. El que quiera ser legislador que lo haga por convicción y por amor a su pueblo, a su patria, a su Estado, a su ciudad, a su país y que REALMENTE HAGA LEYES EN BENEFICIO DE TODOS.  El hecho de que en otros países el diputado sea el carnicero, bombero, albañil, etc.; los hace más empáticos con la sociedad, buscando el beneficio común. Y lo que nos diferencia a nosotros, es que vemos cómo los legisladores van por un interés personal, un interés propio o de grupo y eso le ha dado “en la torre” a las instituciones y al aparato tanto legal como judicial, que tenemos“.

Como mencionaba al inicio, esta es una parte del ser humano que representa a muchas de las víctimas que se sienten desamparadas y que hoy puede dar testimonio de vida, tras haber sobrevivido, y que lejos de sentirse debilitado, vive con mayor intensidad y motivación.

Desde mi trinchera, agradezco sinceramente su apoyo y reitero mi admiración y respeto como profesional del derecho pero sobre todo como ser humano.

Ps.1. ¡Bendita cadena, Batman! No es broma cuando las madres decimos que tenemos ojos hasta en la espalda.

Ps.2. En un  mundo de injusticias, siempre hay luciérnagas brillando en la oscuridad.

Ps.3. Si son víctimas de abuso, acoso, violencia… hablen, denuncien, alcen la voz y acérquense con un profesional en la materia.  Hay profesionales que aparte de tener cartera, tienen corazón… tal es el caso.

ps.4. Cuando escuchaba las respuestas de “Témoc” vino a mi mente Esta canción, de Silvio Rodríguez:

“…Esta canción es más que una canción
Y un pretexto para sufrir
Y más que mi vivir, y más que mi sentir

Esta canción es la necesidad
De agarrarme a la tierra al fin
De que te veas en mí
De que me veas en ti

Yo sé que hay gente que me quiere
Yo sé que hay gente que no me quiere…”

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-

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