Taller de Historia de Tecate, A.C.

Por: Prof. José Luis Bobadilla

El descubridor Hernán Cortés, con tres embarcaciones, 113 peones y 40 jinetes, desembarcó el 3 de mayo de 1535 en el hoy puerto de La Paz, dándole el nombre de Bahía de la Santa Cruz en honor a la fecha de su llegada.

Fundó una colonia que no prosperó y, debido a las constantes hostilidades con los indígenas, partió para exiliarse en el puerto de Acapulco.

Se dice que Cortés, quejándose del calor expresó en latín: “Oh, cállida fornax“, y que de esa expresión se derivó el nombre que se le dio a la región: “California”.

El papa Pablo III (Alejandro Farnesio, declara por Bula Papal del 16 de junio de 1537, que los indígenas del Nuevo Mundo son libres y capaces de recibir fe y sacramentos apostólicos romanos.

SEBASTIÁN VIZCAÍNO

Partió de Acapulco el almirante Sebastián Vizcaíno, el 5 de mayo de 1602, hacia la Bahía de Mazatlán donde tomó rumbo al oeste, hasta Cabo San Lucas, con navegantes idóneos y diestros marineros dedicando dos años en prepararse presentando como flota tres navíos: “San Diego”, “Santo Tomàs” y “Tres Reyes”, llevando como cronista a fray Antonio de la Ascensión, un religioso de los Carmelitas Descalzos.

JUAN DE UGARTE

Juan de Ugarte nació el 22 de julio de 1660, en el poblado de San Miguel Tegucigalpa, en el Obispado de Honduras, sus padres eran originarios de España de territorio vasco.

A la edad de 17 años ingresó al Colegio de Tepotzotlán, ubicado en el Estado de México, donde estudió gramática, filosofía y teología.

EUSEBIO FRANCISCO KINO

El 3 de mayo de 1681, llega a la Nueva España el jesuita Fray Francisco Eusebio Kino (36), colonizador de Sonora y California.

FRANCISCO HERMENEGILDO TOMÁS GARCÉS

Por supuesto que los padres Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, y Juan Díaz tuvieron como inspirador a Fray Francisco Eusebio Kino, quien, enrolado en la orden de los jesuitas, llegó a Veracruz el 3 de mayo de 1682.

Por la media noche del 17 de enero de 1683, las fragatas “La Capitana” a las órdenes de Blas de Guzmán y “La Almiranta” a las de Francisco de Pereda y Arce, también iban el almirante y su amigo, el padre Matías Goñi; también fray Eusebio Francisco Kino (38) viajaba en esta nave, izaron las velas al viento y zarparon hacia California.

Carlos II

Después de fondearse en la bahía el primero de abril de 1683, Isidro Antondo y Antillón y fray Eusebio Francisco Kino , entraron caminando al sur, hasta la boca del puerto de La Paz; y algunos saltaron a tierra, y hallaron un lindísimo ojo de agua, muchísima leña, un carrizal, rastros de indígenas, etc.

La rebautizó con el nombre de Islas Carolinas, en honor de Carlos II llamado «el Hechizado», Rey de España.

Por la media noche del 17 de enero de 1683, las fragatas “La Capitana” a las órdenes de Blas de Guzmán y “La Almiranta” a las de Francisco de Pereda y Arce, también iban el almirante y su amigo, el padre Matías Goñi; también fray Eusebio Francisco Kino (38) viajaba en esta nave, izaron las velas al viento y zarparon hacia California.

Allí está consignada la fecha del establecimiento de la primera residencia jesuita en la Baja California:

“Desde hoy -16 de marzo de 1684- empezamos los padres a comer en nuestra casa y no en la mesa del señor Almirante (Atondo)”.

Eusebio Francisco Kino:

“En 25 de abril de 1684, Día de San Marcos. Saqué y enseñó a los indios unas cuantas láminas y estampas o imágenes de la vida, pasión y resurrección de Nuestro Señor; y de otros animales y pájaros, y gustaron mucho de verlas y nosotros muchísimo de ver la docilidad con que aquellas imágenes -que las colgué alrededor de mi aposento- aprendìan a conocer y decir, así en castellano como en su lengua, cual era Nuestra Señora, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; el Santo Niño, San José, Santa María Magdalena, el Santo Cristo, los Santos Apóstoles, etc.”.

RÍO DE SANTO TOMÁS

El 14 de diciembre de 1684, Isidro Antondo y Antillón y fray Eusebio Francisco Kino fueron los primeros europeos que atravesaron a lo ancho California, cerca de la desembocadura de un arroyo al que nombraron Río de Santo Tomás.

El 8 de mayo de 1685, Isidro Antondo y Antillón y el padre Pedro Matías de Goñi, conocido como Matías Goñi se embarcaron con rumbo a Matanchel en Sinaloa, allí desembarcaron pocos días después.

Con este designio, el padre Kino salió de México el 20 de octubre de 1686, y al pasar por las provincias de Tepehuana y Sinaloa inflamó los ánimos de aquellos misioneros jesuitas en favor de la conversión de los miserables y desamparados californios.

FRANCISCO XAVIER SAETA

El 4 de marzo de 1694, el padre Francisco Xavier Saeta le escribió a Eusebio Francisco Kino: “He embonado la casa y la estoy blanqueando”.

El padre Francisco Xavier Saeta:

“He limpiado un amenísimo pedazo de huerta, en la cual están plantados los arbolitos y sembradas las semillas de hortalizas para el refresco de los navegantes de la California”; y el 15 de marzo de 1694, vuelve a escribirle al padre Eusebio Francisco Kino:

“Ayer, 14 del corriente, recibí la gratísima de vuestra reverencia con el indio Santiago, el cual me truxo las 80 cabezas de ganado menor para avío desta nueva misión, que con las 35 antecedentes, son 115.

El martes santo 2 de abril de 1695, por la Rebelión de Tubutama el padre Francisco Xavier Saeta fue asesinado.

Esto fue cuando ya la amenaza apache masacraba la frontera; en ese tiempo, casi por más de medio siglo, los pimas habían sostenido fidelidad hacia el gobierno español, respeto a los padres misioneros y franca amistad hacia la “gente de razón”; así que ya estaba casi en el olvido la primera sublevación de Tubutama de 1695, cuando “con dos jaras” (flechas) murió -el día 2 de abril en sábado de gloria- el Padre Francisco Javier Saeta dentro de la Misión de la Concepción de Nuestra Señora de Caborca, del cual el padre Francisco Eusebio Kino (50) su contemporáneo, con elogios le llama protomártir.

JUAN MARÍA SALVATIERRA

A consecuencia de estas nuevas ocupaciones del padre Eusebio Francisco Kino, el padre Juan María Salvatierra, tuvo que embarcarse solo para California el 10 de octubre de 1697, acompañándolo tres indios, un cabo y cinco soldados.

Reconociendo las dificultades de sequías confrontadas por el padre Eusebio Kino , el padre Juan María Salvatierra determinó buscar otro sitio más apropiado para su misión y el 15 de octubre de 1697 zarpó de San Bruno, rumbo hacia el sur.

La costa enfrente de la Isla del Carmen, conocida en cochimí como Conchó, explorada por Isidro Antondo y Antillón y fray Eusebio Francisco Kino (52) en 1685 aparecía abundantemente abastecida de agua dulce y fondeando allí el 19 de octubre de 1697, seis días después el jesuita Juan María Salvatierra (49), fundó la primera misión permanente en las Californias, Nuestra Señora de Loreto.

El padre Juan María Salvatierra (49) comenzó a edificar la primera misión en Loreto el 20 de octubre de 1697; a esa misión se agruparon los primeros indígenas convertidos, quienes formaron rápidamente una aldea que vino a ser después la capital de Baja California y donde residió el gobierno hasta 1820, época en que la ciudad naciente de La Paz vino a ser la residencia del gobierno y la capital de la Península.

Punto de partida y de retorno, Loreto tuvo desde su fundación el 25 de octubre de 1697, un papel crucial en la red de misiones que se fueron tendiendo a lo largo de la península durante los setenta años de catequización jesuítica y en la expansión exploradora hacia la Alta California encomendada a los frailes franciscanos y dominicos.

El 23 de noviembre de 1697, el padre Salvatierra (49) y sus hombres, casi agotados ya sus víveres, pronto recibieron auxilio que les llevaba otro jesuita, Francisco María Píccolo (43).

FRANCISCO MARÍA PÍCCOLO

El sábado 23 de noviembre de 1697, al concluir la primera exhortación de las establecidas para aquel día por el padre Salvatierra, arribó al puerto la galeota que conducía al padre jesuita, Francisco María Píccolo, destinado a la misión en lugar del padre Kino.

Pronto los esfuerzos del padre Eusebio Francisco Kino, por levantar la moral y avituallar al ejército pima, dieron su resultado; el jefe Coro venció a los apaches y sus confederados el 30 de marzo de 1698.

NEIL A. ARMSTRONG

El 22 de septiembre de 1698, el padre Eusebio Francisco Kino, emprendió, junto con el teniente Diego Carrasco, una expedición hasta la cumbre del volcán de Santa Clara, en la región de paisaje lunar donde entrenaron Neil A. Armstrong y sus compañeros astronautas.

El padre jesuita, Francisco María Píccolo, determinó ir a aquel lugar, como en efecto lo hizo el 10 de marzo de 1699, acompañado solamente de algunos indios amigos a causa del desaliento de los soldados; pero hubo grandes dificultades que vencer en el viaje, porque la montaña era muy escarpada y no había camino abierto.

MISIÓN DE SAN JAVIER

Harry W. Crosby apunta en su libro “Antigua California” que el 24 de octubre de 1699, el padre siciliano Francisco María Piccolo y un grupo de soldados y nativos cochimies se aventuraron hacia el oeste de Biaundó y llegaron a un lugar llamado Ohobeé, ranchería que había sido localizada cuando se fundó la misión de San Javier.

En la dedicatoria de “Favores Celestiales” a Felipe V, firmada el 3 de diciembre (día de San Francisco Xavier) de 1699, el padre Eusebio Francisco Kino (50), expone claramente los tres pasos de su método misionero:

1) Nuestra amistad.              2) Obediencia al rey.                         3) La fe cristiana.

ANTONIO GARCÍA DE MENDOZA

Para dar alguna idea de esto, basta lo que escribió el capitán del presidio de la California, don Antonio García de Mendoza al virrey en carta del 22 de octubre de 1700, en la cual, después de haber dicho que los padres Salvatierra y Francisco María Píccolo, eran unos hombres santos, apóstoles y querubines, y de haber ensalzado hasta las estrellas sus trabajos, su celo y su desprendimiento de las cosas terrenas, se queja amargamente de ellos por los trabajos impedidos en allanar el camino, en construir algunas fábricas y en otras cosas no sólo útiles, sino absolutamente necesarias en la colonia, y concluye de esta manera:

“Yo no hallo otro remedio para refrenar tanta temeridad, que hacérselo saber al reverendísimo padre provincial de la sagrada Compañía de Jesús, y suplicarle que retire de la California a estos religiosos y los ponga donde sean castigados con la pena que merecen, y que a mí también me ponga en un castillo con una gruesa cadena a fin de que pueda yo servir de escarmiento a mis sucesores”.

JUAN DE UGARTE

En tres días de próspera navegación, el padre Juan de Ugarte arribó a Loreto el 19 de marzo de 1701.

HACIA EL RÍO COLORADO

En el “Domingo de Ramos”, 20 de marzo de 1701, los padres Eusebio Francisco Kino y Juan María de Salvatierra y Vizconti, queriendo conocer toda la región en que destinaban sus empeños, se encaminaron hacia el rio Colorado acompañados de 10 soldados y algunos indios; fueron por el camino pegado a la costa del mar de Cortés; pasaron hacia el poniente sobre los medanales al sur de los picos del volcán de Santa Clara (El Pinacate).

Habiendo dejado el día 19 de noviembre de 1701, durante la mañana, la última ranchería yuma de Santa Isabel, la comitiva del padre Eusebio Francisco Kino caminó hacia el Sur sobre tierra llana y plana, quedando al Oriente el arenal desértico y al poniente la cercana orilla del Río Colorado.

A mediodía del 20 de noviembre de 1701, el padre Eusebio Francisco Kino y su comitiva salieron de San Félix de Valois hacia las corrientes bajas del Río Colorado.

El padre Juan de Ugarte salió de México el 3 de diciembre de 1701, con el objeto de llevar provisiones a la colonia, caminó cuatrocientas leguas por tierra hasta un puerto de Sinaloa, en donde no hallando para pasar el golfo más que un barco pequeño, viejo y abandonado como absolutamente inútil, se embarcó en él intrépidamente.

Francisco María Píccolo se embarcó pues el 26 de diciembre de 1701, dejando a los padres Juan María de Salvatierra y Vizconti y Juan de Ugarte en grande necesidad.

MAR DE CALIFORNIA

Finalmente, el padre Eusebio Francisco Kino, acompañado por Manuel González (el que le prometió las estatuas), el 11 de marzo de 1702 dijo la misa “de Santa Francisca Romana, saliéndome el sol por encima del remate de la Mar de California, argumento evidentísimo de que ya estábamos en la (Alta) California”.

JUAN MARÍA SALVATIERRA

El padre Juan María Salvatierra había sido llamado a México para asistir al acuerdo en que se debían tratarse los negocios de la California, pero antes de ausentarse quiso celebrar la dedicación de la nueva iglesia fabricada en Loreto.

Esta se celebró el 8 de septiembre de 1702 con grande solemnidad y con el bautismo de muchos catecúmenos, aunque en aquellas misiones se celebraba comúnmente la antigua costumbre de la iglesia de conferir estos bautismos en las vigilias de Pascua y Pentecostés.

Habiendo pues dado el padre Juan María Salvatierra todas la órdenes oportunas y encargando al padre Juan de Ugarte el gobierno espiritual y económico de la California, se embarcó el 1 de octubre de 1702 acompañado del portugués don Esteban Rodríguez Lorenzo y del alférez Juan Bautista de Escalante , que también había renunciado a su empleo.

NUEVO PRESIDIO

Al padre Juan María Salvatierra le hicieron esperar entonces que se tendría el acuerdo prevenido por el rey para liberar sobre el establecimiento de un nuevo presidio en la California y sobre los otros puntos relativos a ella cuya deliberación parece que en aquellas circunstancias debía haberse tenido sin excusa, porque a más el jefe de las misiones, del antiguo capitán, el portugués don Esteban Rodríguez Lorenzo y del alférez del presidio, Juan Bautista de Escalante, todos tres muy prácticos en la California, había en México muchas personas que habiendo viajado a las Islas Filipinas, habían adquirido algún conocimiento de la costa occidental de la península, donde se quería poner el nuevo presidio; pero el acuerdo no se celebró, y solamente se le previno al padre Salvatierra que presentarse un memorial, como lo hizo el 25 de mayo de 1705.

Otro guama aún más malvado, que anduvo mucho tiempo moviendo a los gentiles y catecúmenos contra los misioneros y su doctrina, movido del Señor vino a Loreto, donde a la sazón estaba el padre Juan de Ugarte, a pedir llorando el bautismo. Se le negó muchas veces por desconfianza; pero hizo tantas instancias, y dio tantas muestras de sinceridad y prometió tantas lágrimas enmendar su vida, ofreciendo quedarse siempre en Loreto para vivir a la vista de los españoles que, por fin, consiguió que se le instruyese y se le bautizase el 7 de diciembre de 1705, por cuyo motivo se le dio el nombre de Ambrosio.

EUSEBIO FRANCISCO KINO

Al regresar de su expedición con el franciscano fray Manuel de la Oyuela y Velarde, el padre Eusebio Francisco Kino se encontró con una carta del padre Juan de Ugarte, fechada el 7 de septiembre de 1706 en la que le aconsejaba que suspendiera la construcción del barco en el desierto de Caborca, pues era más barato comprar un barco “perulero” (un mercante del Perú).

PENÍNSULA

De las diversas entradas del padre Francisco Eusebio Kino a la sierra de Santa Clara (Pinacate), subiendo en la última incursión hasta sus cumbres, el 6 de octubre de 1706, junto con fray Manuel de la Oyuela y Velarde de los frailes de San Francisco, asistido por el cabo Juan Antonio Durán mostró a un grupo de testigos oficiales que la Baja California no era una isla, sino que era una verdadera península.

NACIÓN YAQUI

El general de la numerosa y guerrera nación yaqui, no solamente concedió los cuarenta hombres escogidos que se le pidieron, sino que él mismo los llevó a Loreto, de donde salió el padre Juan de Ugarte, el 26 de noviembre de 1706, acompañados de ellos, del capitán y doce soldados del presidio y de algunos californios, y encaminándose a la costa, reconoció un gran trecho de ella sin poder hallar un buen puerto, como se requería para que sirviese de escala a los navíos de las Islas Filipinas.

El 15 de marzo de 1711, en Magdalena, Sonora, muere el padre jesuita Francisco Eusebio Kino.

JUNÍPERO SERRA FERRER

Fray Junípero Serra Ferrer nació en la villa de Petra de la isla de Mallorca, España, a la una de la mañana del 24 de noviembre de 1713, hijo del matrimonio formado por don Antonio Serra y doña Margarita Ferrer.

Los conocimientos en filosofía y teología le permitieron dedicarse a ejercer la docencia.

Pusiéronle por nombre Miguel José, los que conservó en la confirmación, que recibió el 26 de mayo de 1715 en la misma parroquia de la villa de Petra de la isla de Mallorca, España, en la que había sido bautizado.

La ruta obligada hacia las pinturas rupestres de la sierra de San Francisco se emprende desde San Ignacio Kadacaamán, pueblo que tiene su asiento en una cañada y fue descubierto por el padre siciliano Francisco María PiccolO, el 19 de noviembre de 1716.

Al fin de 1710, al virrey Francisco V Fernández de la Cueva y Fernández de la Cueva, 10o. Duque de Alburquerque le sucedió Fernando de Alencastre Noroña y Silva, 1er. Duque de Linares el cual, aunque afecto a los jesuitas, como sus ilustres mayores, no favoreció la empresa de la California en los seis años de su gobierno, porque ni él ni los jesuitas tuvieron noticia de las nuevas órdenes del rey, ocultadas por los que no hacían aprecio del adelantamiento del cristianismo en la península; más lo que no hizo de virrey, lo hizo de particular, porque habiendo concluido su gobierno, y de allí a poco terminado también el curso de su vida en México el 3 de junio de 1717, dejó en su testamento cinco mil pesos a aquellas misiones.

MIGUEL JOSÉ SERRA FERRER

Pusiéronle por nombre Miguel José, los que conservó en la confirmación, que recibió el 26 de mayo de 1715 en la misma parroquia de la villa de Petra de la isla de Mallorca, España, en la que había sido bautizado.

JUAN DE UGARTE

El padre Juan María de Salvatierra y Vizconti (69), a pesar de su vejez y de sus graves enfermedades, salió de Loreto acompañado del hermano Jaime Bravo el 31 de marzo de 1717, dejando al padre Juan de Ugarte (55) la superintendencia del presidio y de las misiones.

MISIÓN DE NUESTRA SEÑORA DEL PILAR DE LA PAZ

El 3 de diciembre de 1720, los padres jesuitas Juan de Ugarte y Jaime Bravo construyeron la misión de Nuestra Señora del Pilar de la Paz.

El 15 de mayo de 1721, el padre jesuita Juan de Ugarte, con el capitán Guillermo Strafford a bordo de “El Triunfo de la Santa Cruz” zarpó de Loreto y, reconociendo la costa de Sonora e Isla Tiburón en busca de sitios para misiones para los seris, continuaron su navegación hasta la desembocadura del Río Colorado antes de volver a Loreto en septiembre.

IGNACIO MARÍA NÁPOLI

El padre Ignacio María Nápoli llegó el 2 de agosto de 1721 a La Paz, en donde los neófitos de la misión le recibieron con muchas demostraciones de respeto, hincándose a besarle las manos y le llevaron con el capitán y cuatro soldados que le acompañaban a la iglesia en cuya puerta le esperaba el padre Jaime Bravo.

 

MISIÓN DE NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE DE HUASINAPI

Finalmente, en 19 de noviembre de 1721, salieron de la Misión de Nuestra Señora de Guadalupe de Huasinapi los padres Sebastián de Sistiaga y Helen con el capitán Guillermo Strafford y algunos soldados del presidio, e internándose hasta los 28°, reconocieron con exactitud un gran techo de la costa.

MIGUEL SERRA FERRER

Considerando a Miguel Serra Ferrer muy muchacho; pero informado de que ya tenía edad cumplida, no obstante, de pequeña estatura y enfermizo, lo admitió y tomó el hábito en el Convento de Jesús, extramuros de la ciudad, el día 14 de septiembre de 1730, siendo de edad de dieciséis años, nueve meses y veintiún días.

El padre Juan de Ugarte murió el 29 de diciembre de 1730, en su Misión de San Javier (B.C.S.); los 30 años que vivió en la California valen por un siglo si se considera toda la obra de este hombre frente a mil necesidades; así fue valorado el trabajo por sus hermanos jesuitas.

ORDENACIÓN

Cumplido el año de la aprobación, profesó en dicho Convento de Jesús, el día 15 de septiembre de 1731, tomando el nombre de Junípero por la devoción que tenía a aquel santo compañero de nuestro seráfico padre San Francisco, cuyas santas sencilleces y gracias de la gloria celebrada y refería con devoción y ternura.

ÚLTIMO PANEGÍRICO

El último panegírico que predicó fue encomendado de la universidad, en la solemnísima fiesta que el 25 de enero de 1732 , celebra a su patrón y compatriota, el iluminado doctor, el beato Raimundo Lulio, a que asiste la universidad formada y los hombres más doctos de la ciudad; y como su reverencia pensaba sería el último (como lo fue en su patria), parece que echó el resto de su habilidad para crédito de la provincia, dejando a todos admirados.

La carta del padre Guillén llegó a México el 13 de abril de 1735, y luego fue entregada al arzobispo virrey por el provincial; pero viendo éste que ni con aquella carta ni con dos memoriales que le presentó a aquel señor podía conseguir el deseado remedio de las urgentes necesidades de la California, resolvió escribir en derechura al mismo soberano, de cuyo celo, manifestado en tantas órdenes expedidas en favor de las misiones, no dudaba alcanzar el remedio.

Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, nació en la Villa Morata de Jalón, España, el 2 de abril de 1738.

SANTIAGO BRAVO

El padre Santiago Bravo murió en 13 de mayo de 1744, en la Misión de San Javier a donde había ido esperando aliviarse con aquel temperamento; pero su cadáver fue llevado a Loreto y sepultado en la iglesia que él mismo fabricó.

Se aprestaron cuatro barcos en el pequeño puerto de San Carlos, situado más allá de los 28°, y en ellos se embarcaron el 9 de junio de 1746, el padre Fernando Consag, algunos californios y un número suficiente de yaquis, que entre aquellos indios son los más prácticos en la marinería.

El 11 de julio de 1746, llega a la desembocadura del Río Colorado el padre jesuita Fernando Consag, en un viaje de exploración.

El 12 de julio de 1746, el padre jesuita Fernando Consag naufraga, debido a un fuerte temporal, durante su viaje de exploración por el Río Colorado.

Después aquellos lugares nombrados por el padre Juan B. Ugarte, con mis detalles fueron precisados por Fernando Consag en julio 14 de 1746, quien llegó a la boca del Colorado, donde permaneció por dos semanas; luego ascendió sobre las aguas del rio, hasta que fue forzado a regresar por la potencia del choque con la marea.

Cuando este informe llegó a Madrid, había muerto ya Felipe V de España, llamado «el Animoso»; pero Fernando VI de España, llamado «el Prudente» o «el Justo» , su digno hijo y sucesor, expidió, en 4 de diciembre de 1747, una cédula dirigida a Pedro de Cebrián y Agustín, V conde de Fuenclara, virrey de México en la cual insertó la ya citada de su padre, y le mandó una copia del informe, para que examinándolo todo y conferenciando con personas sabias, ejecutase, sin esperar nueva orden, lo que hallase más conveniente a la propagación del cristianismo en aquellos países tan distantes de la corte.

El 13 de abril de 1749, cuando Fray Junípero Serra Ferrer rondaba los 36 años, se embarcó destino a la Nueva España.

PRIMER TROZO DE LA MISIÓN

El día 28 de agosto de 1749, se embarcó en Cádiz el primer trozo de la misión: componíase del presidente (hijo del Colegio del Sancti Spíritu en la provincia de Valencia), y de otros veinte religiosos, entre los cuales venía el venerado padre fray Junípero Serra.

VERACRUZ

Concluida la misión, salieron del puerto de Cádiz para el de Veracruz el día 2 de noviembre de 1749, y estando a la vista de él (a últimos del mismo mes), se levantó un norte tan furioso, que obligó a poner la proa para la sonda de Campeche, y caminando hacia ella, sobrevino una deshecha tempestad, que duró los días 3 y 4 de diciembre y en la noche de este último, dándose todos por perdidos, no tenían más recurso que disponerse para la muerte; pero nuestro fray Junípero Serra se  mantuvo en medio de tanta tempestad con tan inalterable paz y quietud de ánimo, como si desde luego se hallara en el día más sereno; de suerte que preguntándole si tenía miedo, respondía que algo sentía, pero que haciendo memoria del fin de su venida a las Indias, se le quitaba luego.

COLEGIO DE SAN FERNANDO DE MÉXICO

No obstante este accidente, después de haber descansado un día, prosiguieron su camino, y la tarde del último día de diciembre de 1749, llegaron al santuario de nuestra Señora de Guadalupe; allí pasaron la noche, y habiendo la mañana siguiente dicho misa de gracias a la gran Señora, se fueron para el Colegio de San Fernando, que dista una legua escasa.

Entró en el apostólico Colegio de San Fernando de México su nuevo alumno, el venerable padre Fray Junípero Serra, el día 1 de enero del año de 1750, como a las nueve de la mañana, y tiempo en que la comunidad se ocupaba en el rezo.

MISIÓN DE SANTA GERTRUDIS LA MAGNA

La Misión de Santa Gertrudis La Magna fue fundada el 15 de julio de 1752 al norte del paralelo 28, por el padre jesuita George Retz y nombrada así por disposición de su dotador Marqués de Villapuente.

MISIÓN DE SAN FRANCISCO DE BORJA ADAC

El 27 de agosto de 1759, es inaugurada por el padre Wenceslao Link la Misión de San Francisco de Borja Adac.

MISIÓN NUESTRA SEÑORA DEL PILAR DE TODOS SANTOS

El 30 de agosto de 1764, dos años después de la fundación de la Misión de San Francisco de Borja, murió en la de Todos Santos, el padre Carlos Neumayer, alemán.

A su retorno al Colegio de San Fernando en la ciudad de México,  Fray Junípero Serra Ferrer recibió la encomienda de hacerse cargo de las misiones abandonadas en Baja California, por la expulsión de los jesuitas el 2 de abril de 1767, decretada por el rey Carlos III de España, llamado «el Político» ​ o «el Mejor Alcalde de Madrid».

Habiéndose extinguido en la Nueva España la sagrada Compañía de Jesús el día 25 de junio de 1767, fueron encomendadas por el excelentísimo señor virrey Carlos Francisco de Croix, marqués de Croix , (de acuerdo con el ilustrísimo señor visitador general del reino D. José de Gálvez, al colegio de San Fernando de México, las misiones que los padres expulsados administraban en California.

LLAMADO

Así lo practicó llegando a él el día 12 de julio de 1767, y llegando a tomar la bendición del reverendo padre guardián, éste dijo al venerable:

“Lo llamaba para que fuese con los demás religiosos asignados por el discretorio a la California”.

EXPULSIÓN DE LOS JESUITAS

Para 1767 fue expulsada la Compañía de Jesús y en la península la sustituyó, el 25 de julio de 1767, la orden franciscana cuyo Presidente en las Californias era fray Junípero Serra (54).

TEPIC

Habiendo llegado allí el venerable padre presidente, el 21 de agosto de 1767, supo por el coronel comandante de la tropa que estaba acuartelado, con el destino de ir parte de ella a la California y Sonora, de que aún estaba despacio la salida, por lo muy atrasados que se hallaban los dos paquebotes, con el fin de transportarnos a todos para la California y Sonora, se estaban construyendo, nos vimos precisados a detenernos en el citado pueblo de Tepic, manteniéndonos el rey de su cuenta.

PUERTO DE SAN BLAS

Fray Francisco Palou:

“Llegó el deseado día de embarcarnos en el paquebote nombrado “La Concepción”, que había anclado en el Puerto de San Blas por mes de febrero, trayendo de la California los diez y seis padres jesuitas, y en el mismo salimos el día 12 de marzo de 1768, habiendo anochecido ya, igual número de misioneros del Colegio de San Fernando, cuyo seráfico y apostólico escuadrón era caudillo el venerable padre Fray Junípero Serra (José Miguel Serra y Ferrer, 55)”.

GASPAR DE PORTOLÁ

El 1 de abril de 1768, 15 franciscanos, al mando de Fray Junípero Serra (55), y del gobernador Gaspar de Portolá, llegaron a Loreto para hacerse cargo de las misiones que habían dejado los jesuitas.

16 MISIONEROS

Fue designado el padre Fray Junípero Serra para presidir el grupo de diez y seis misioneros franciscanos que llegaron a la península el 1 de abril de 1768.

EXPEDICIÓN DE MONTEREY

Entró a cargo de este colegio el 1 de abril de 1768, siendo sus primeros misioneros el reverendo padre presidente Fray Junípero Serra, y su compañero Fr. Fernando Parrón, aunque sólo corrieron con lo espiritual hasta que salieron para la expedición de Monterey, en que entró a administrarla el bachiller don Pedro Fernández, capellán de la expedición de Guaymas.

DISTRIBUCIÓN

El 3 de abril de 1768, fray Junípero Serra distribuye las misiones: Santa Gertrudis la Magna, San Francisco de Borja y Santa María de los Ángeles Cabujakaamang a franciscanos.

Ya cumpliendo casi nueve meses de estar los padres arrestados en Guaymas, el 22 de mayo de 1768, en el navío “El Príncipe” fueron embarcados quedando casi 50 días al garete de las olas sobre el Mar de Cortés hasta anclar en Puerto Escondido, Baja California, donde se le permitió auxiliarlos a un español que tenía un hermano jesuita.

Embarcóse D. José de Gálvez en el Puerto de San Blas el día 24 de mayo de 1768, y fue tan dilatada su navegación que no llegó a la península hasta el 6 de julio que desembarcó en la Ensenada de Cerralvo en el sur de la California, y puso su real en el nombrado de Santa Ana, cien leguas distante del Presidio de Loreto, trayendo no sólo el encargo de visitar la península de California, sino también real orden de despachar una expedición marítima a fin de poblar el Puerto de Monterey, o al menos el de San Diego.

Los padres arrestados continuaron a San Blas el 18 de julio de 1768.

REAL DE MINAS DE SANTA ANA

Llegó fray Junípero Serra (José Miguel Serra y Ferrer), al Real de Minas de Santa Ana, el 31 de octubre de 1768.

EL “SAN CARLOS”

El “San Carlos” se hizo a la vela el 6 de enero de 1769.

Fray Junípero Serra (José Miguel Serra y Ferrer), y el visitador José Bernardo de Gálvez y Gallardo, que contemplaron su partida, se aprestaron entonces para continuar con los otros preparativos de la expedición.

EL “SAN ANTONIO”

El “San Antonio” había de permanecer poco tiempo en Cabo San Lucas, ya que el 15 de febrero de 1769 navegó en seguimiento del “San Carlos” a lo largo de las costas occidentales de la península, con rumbo al norte.

MISIÓN DE LA PURÍSIMA CONCEPCIÓN

Salió el padre Fray Junípero Serra de la Misión de la Purísima Concepción a 26 de febrero de 1769.

VELICATÁ

Mientras que el capitán Gaspar de Portolá, salió de Loreto para Velicatá el 9 de marzo de 1769.

El padre Fray Junípero Serra llegó a la frontera, en donde estaba formado el real (en el paraje que aquellos gentiles nombraban Velicatá), el Miércoles Santo, día 22 de marzo de 1769, encontrando ya allí al señor capitán Fernando Javier Rivera y Moncada, el cosmógrafo José Cañizares y a toda la gente pronta para la salida, y ya confesada por el misionero de San Borja, que con este fin había subido, para que el siguiente día Jueves Santo, cumpliesen todos (como lo hicieron) con el precepto de nuestra Santa Madre la Iglesia, y el Viernes Santo, 24 de marzo, saliese la expedición.

PRIMERA AVANZADA

23 de marzo de 1769. Primera Avanzada:

Comandante: Fernando de Rivera y Moncada, Fray Juan Crespí y Pilotín: José de Cañizares. Soldados de Cuera del Real Presidio de Loreto: Cabo: José Velázquez; Guillermo Carrillo, Mariano Carrillo, Andrés de Cota, José Ignacio de la Higuera, José Gabriel de Ojeda, Juan José de Robles, Bernardo Rubio, Antonio Vicente Ruíz. Reclutas: Francisco Javier Aguilar, Mariano Verdugo, José María de Góngora, Sebastián de Alvitre y Juan María Miranda. Artesano y Muletero: Sebastián Manríquez. 42 Nativos Neófitos de las Misiones de Loreto y San Ignacio.

RESTOS DE LA MISIÓN DE SANTA MARÍA DE LOS ÁNGELES

El 24 de marzo de 1769, la primera expedición por tierra, salió de la Misión de Santa María de los Ángeles con destino a San Diego, al mando del capitán Fernando Javier Rivera y Moncada (44); acompañado del cronista franciscano Juan Crespí.

INSPECCIÓN DE LAS MISIONES

El franciscano Junípero Serra, queriendo realizar una visita de inspección de las misiones durante el viaje al norte, salió de Loreto el 28 de marzo de 1769 y continuó a San Francisco Javier donde nombró al fray Francisco Palau al puesto de padre-presidente de las misiones de San José de Comondú, La Purísima Concepción, Nuestra Señora de Guadalupe, San Ignacio, Santa Gertrudis, San Francisco Borja y Santa María.

Fray Francisco Palau:

“El día 28 de marzo de 1769, tercera fiesta de la Pascua de Resurrección, salió nuestro venerable padre de su misión y presidio de Loreto, después de haber celebrado con devoción que acostumbraba la Semana Santa y de dejar confesados todos los vecinos de la misión y presidio y comulgados en cumplimiento del precepto de nuestra Santa Madre Iglesia, pues por estas atenciones no pudo ir con el señor gobernador; pero habiéndolas concluido en el último día de la Pascua, cantó la misa, predicó al pueblo, despidiéndose de todos hasta la eternidad y partió de Loreto (como llevo dicho) sin más compañía que la de dos soldados y un mozo”.

Los 24 padres arrestados sobrevivientes salieron el 8 de abril de 1769 con destino a España, allà se distribuyeron hacia diferentes lugares.

JOSÉ BERNARDO DE GÁLVEZ Y GALLARDO

Concluida su visita, el visitador José Bernardo de Gálvez y Gallardo, se embarcó en la misma balandra dicha, el día 1 de mayo de 1769, para pasar a la ensenada de Santa Bárbara del Río Mayo, en la costa de Sonora, llevando en su compañía el paquebote “Señor San José”, a fin de que recibiese parte de la carga que tenía el expresado señor encargada, quien habiendo llegado felizmente, caminó al Real de Los Álamos para dar principio a las visitas de aquellas provincias, y el dicho paquebote, recibida la carga, volvió a Loreto por la restante que estaba preparada.

FERNANDO JAVIER RIVERA Y MONCADA

El primer explorador europeo que llegó por tierra procedente del sur fue el capitán Fernando Javier de Rivera y Moncada junto con fray Juan Crespí (48), el 2 de mayo de 1769 cuando viajaban hacia San Diego.

El 14 de mayo de 1769, el capitán Fernando Javier Rivera y Moncada y su gente llegaron a San Diego; pero debido a la infección de la pierna del franciscano Junípero Serra y varios casos de escorbuto, el grupo del capitán Gaspar de Portolá, no alcanzó la bahía hasta el 29 de junio.

SEGUNDA AVANZADA

15 DE MAYO DE 1769.

Gobernador: Don Gaspar de Portolá y Fray Junípero Serra.

Soldados de Cuera del Real Presidio de Loreto.

Sargento: José Francisco de Ortega, Pedro Antonio Amador, José Gabriel de Arce, Pablo Antonio de Cota y José Carlos Rubio.

Arrieros: Juan Antonio Coronel y José María Vegerano.

Asistentes y Nativos: Ignacio, al servicio de Portolá y

Los Neófitos: Juan Evangelista Benno y Sebastián Tarabal. 

MARCHA PARA SAN DIEGO

Debido a una pierna infectada, el padre Fray Junípero Serra fue demorado en su partida para el norte hasta el 21 de mayo de 1769 cuando, acompañado del gobernador Gaspar de Portolá y el sargento José Francisco de Ortega (35), inició la marcha para San Diego.

PUERTO DE SAN DIEGO

Fray Francisco Palou:

“De los días que van del 21 de mayo de 1769 en que salimos de San Juan de Dios, según escribí a vuestra reverencia, hasta el 1 de julio que llegamos acá, quitados como ocho días que entreveradamente hemos dado de descanso a los animales, uno aquí y otro acullá, todos los días hemos caminado; pero la mayor jornada ha sido de seis horas, y de éstas sólo ha habido dos, y las demás de cuatro a cuatro y media, de tres, de dos y de una y media como cada día expresa el diario, y eso a paso de recua; de lo que se infiere que habilitados y enderezados los caminos podrán ahorrar muchas leguas de rodeos excusados; no está esto muy lejos, y creo después de dicha diligencia, podrá ser materia de unos doce días para los padres que los soldados ahora dicen que irán a la ligera hasta la frontera de Velicatá en mucho menos”.

ENSENADA

El 20 de junio de 1769, siguiendo la ruta que iba abriendo el capitán Fernando Javier de Rivera y Moncada, estuvieron en lo que hoy es Ensenada don Gaspar de Portolá y fray Junípero Serra, quien en carta del 3 de julio que envió desde San Diego a fray Francisco Palou, hizo una descripción del paisaje y de los nativos que habitaban la región, parte de la cual se transcribe en el capítulo “Los franciscanos y el inicio de su obra”; en ella, Fray Junípero Serra, se refirió a lo hermoso del paisaje y a la abundancia de alimento del que disfrutaban los gentiles, así como la gran cantidad de berrendos, en lo cual coincide con la narración de Juan Páez.

PUERTO DE SAN DIEGO

El misionero Fray Junípero Serra Ferrer optó por salir en la que iría por tierra, habiendo llegado al Puerto de San Diego el 1 de julio de 1769.

Fray Francisco Palou:

“De los días que van del 21 de mayo de 1769 en que salimos de San Juan de Dios, según escribí a vuestra reverencia, hasta el 1 de julio que llegamos acá, quitados como ocho días que entreveradamente hemos dado de descanso a los animales, uno aquí y otro acullá, todos los días hemos caminado; pero la mayor jornada ha sido de seis horas, y de éstas sólo ha habido dos, y las demás de cuatro a cuatro y media, de tres, de dos y de una y media como cada día expresa el diario, y eso a paso de recua; de lo que se infiere que habilitados y enderezados los caminos podrán ahorrar muchas leguas de rodeos excusados; no está esto muy lejos, y creo después de dicha diligencia, podrá ser materia de unos doce días para los padres que los soldados ahora dicen que irán a la ligera hasta la frontera de Velicatá en mucho menos”.

REGRESO A SAN BLAS

Terminado este primer encuentro con éxito, el 9 de julio de 1769, el “San Antonio” regresó a San Blas con los enfermos mientras el gobernador Gaspar de Portolá, el capitán Fernando Javier Rivera y Moncada, el teniente Pedro Fagés Beleta, el sargento José Francisco de Ortega, el cosmógrafo-ingeniero Miguel Costansó, el padre Juan Crespi y el fraile Francisco Gómez prepararon la marcha hacia el norte en busca de Monterey; y Vicente Vila, Fray Junípero Serra, el fraile Juan Vizcaíno, el capellán fray Hernando Parrón y el cosmógrafo José Cañizares permanecieron en San Diego para fortificar la región y establecer una misión.

El 14 de julio de 1769 partieron hacia el norte en busca de Monterey: el gobernador Gaspar de Portolá y el capitán Fernando Rivera y Moncada, el teniente Pedro Fagés Beleta, el sargento José Francisco de Ortega, el cosmógrafo-ingeniero Miguel Costansó, el padre Juan Crespi y el fraile Francisco Gómez.

MISIÓN DE SAN DIEGO DE ALCALÁ

El 16 de julio de 1769, fray Junípero Serra fundó la Misión de San Diego de Alcalá, en la Alta California, los asentamientos nativos ubicados en el territorio denominado Tecate fueron parte de su jurisdicción.

PROCESO EVANGELIZADOR

El Proceso Evangelizador en Tecate tiene su inicio a partir de la conquista de estas tierras cuando fueron tomadas a nombre de la Corona Española por el misionero fray Junípero Serra , el 16 de julio de 1769, fecha en que es fundada la Misión de San Diego de Alcalá, a la que fue incorporada eclesiásticamente la Ranchería de Tecate Milkuatay como Estación Misional, en tanto, el rancho se sumó al inventario de bienes de la propia misión.

RETORNO A VELICATÁ

Debido a la escasez de provisiones en San Diego, el capitán Fernando Rivera y Moncada volvió a Velicatá el 11 de febrero para conseguir ganado.

FRAY FRANCISCO PALAU

La frontera norte fue de importancia capital para fray Francisco Palau y el regreso del capitán Fernando Rivera y Moncada a San Fernando Velicatá en febrero de 1770 para conducir ganado al norte, demostró la necesidad para la fundación de establecimientos permanentes en la región entre la misión y la de San Diego, una distancia de casi 500 kilómetros.

JUAN JOSÉ PÉREZ HERNÁNDEZ

El 24 de marzo de 1770, el “San Antonio” bajo el mando de Juan José Pérez Hernández (45), con el fraile Juan Vizcaíno, llegó de San Blas.

DOMINICOS

El 8 de abril de 1770, los frailes dominicos obtuvieron permiso del rey de España para evangelizar a los indígenas de la península, por lo que el territorio se dividió entre las dos órdenes religiosas.

Los franciscanos se quedaron en la Alta California y los dominicos en la península o Baja California.

BÚSQUEDA DE MONTEREY

Así, reabastecidos, se inició la búsqueda de Monterey y el 16 de abril de 1770, Juan José Pérez Hernández, acompañado de Fray Junípero Serra y el cosmógrafo-ingeniero Miguel Costansó , zarpó para el norte y el gobernador Gaspar de Portolá y el teniente Pedro Fagés Beleta marcharon por tierra.

El 24 de mayo de 1770, el padre Juan Crespi y el teniente Pedro Fagés reconocieron Monterey.

MONTEREY

Juan José Pérez Hernández, capitán del paquebote “San Antonio”, acompañado de Fray Junípero Serra y el cosmógrafo-ingeniero Miguel Costansó, descubrieron Monterey, fundando ahí la misión y pueblo de San Carlos Borromeo de Monterey, el 31 de mayo de 1770.

FRANCISCO PALOU

En sus “Noticias de la Antigua y Nueva California”, fray Francisco Palou refiere que había recibido una carta del guardián del Colegio de San Fernando, el 1 de julio de 1771, “en el que me pide un cumplido informe de todas las misiones.

26 DOMINICOS

Subsecuentemente fueron despachados veintiséis dominicos para Nueva España y, después de su llegada a Veracruz el 19 de agosto de 1771, y los planes para la división de las Californias fueron iniciados por el padre guardián Rafael Verger del colegio de San Fernando e Iriarte y Laurnaga.

CONCORDATO

Los representantes de las órdenes dominica y franciscana, Juan Pedro de Iriarte y Rafael Verger y Suau, respectivamente, suscribieron el concordato firmado el 7 de abril de 1772.

ANTONIO MARÍA DE BUCARELI Y URSÚA

El 2 de mayo de 1772, el capitán, Juan Bautista de Anza planteó al virrey Antonio María de Bucareli y Ursúa, la conveniencia de trazar un camino terrestre de Sonora al Río Colorado, y de ahí a la Nueva California, propuesta inspirada, al parecer, en los viajes de Eusebio Kino en 1701-1702; pero no se sabe si motu proprio o haciendo eco de las ideas esbozadas en los apuntes legados por su padre al fallecer.

PUNTA EL DESCANSO

La misión más septentrional que podían fundar los padres predicadores quedaría en el arroyo de San Juan Bautista, y su frontera llegaría hasta lo que hoy es Punta El Descanso, lugar que sería el límite entre los territorios dominico y franciscano, o lo que es lo mismo, entre la Baja y Alta California. 

FRAILES DOMINICOS

Dieciocho frailes dominicos más llegaron a Loreto el 12 de mayo de 1773 bajo el Padre Procurador fray Vicente Mora, nombrado al puesto de Padre-presidente, después del triste ahogo de Juan Pedro Iriarte y Laurnaga rumbo a California.

El 17 de mayo de 1773, el fraile Francisco Palau (50) cedió formalmente el campo misional de Baja California a fray Vicente Mora; pero la transferencia de bienes, artículos religiosos y ganado, a veces cuestiones disputadas, demoró la salida de los franciscanos.

El 24 de mayo de 1773, el fraile Francisco Palau (50) zarpó de Loreto para Santa Rosalía de donde iniciará su viaje al norte, realizando los traslados sobre la marcha.

JUAN DÍAZ

Veamos la versión de Juan Díaz de la primera expedición a Monterey:

“Día 2 de enero de este año de 1774, atacaron los apaches la caballada de este real Presidio de Tubac y llevaron algunas caballerías de las que estaban dispuestas para esta expedición; y no habiendo en estas mediaciones otras con que poder reemplazarlas, determinó el señor comandante  Juan Bautista de Anza, con acuerdo de los padres Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, y Juan Díaz tomar su derrota por los pueblos del poniente, dejando el camino más recto, para habilitarse de las cabalgaduras que faltaban.

FRANCISCO HERMENEGILDO TOMÁS GARCÉS

El padre Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, se reintegró a la columna el 1 de marzo de 1774.

KUXILY

El 10 de marzo de 1774, los caminantes de la primera expedición a Monterey, llegan a una gran ranchería de yumas, situada en la margen oeste del Río Gila,  como a media legua (dos kilómetros, aproximadamente), aparentemente, Kuxily, a la que los españoles denominan San Pablo; ranchería donde concurren más de 800 nativos de ambos sexos.

El 11 de marzo de 1774, los caminantes de la primera expedición a Monterey, caminan rumbo al oeste y salen de la zona Kwitsan (actual quechan).

Fray Junípero Serra Ferrer celebró reuniones con el virrey Antonio María de Bucareli y Ursúa en la Ciudad de México durante casi siete meses y antes de regresar a San Diego el 13 de marzo de 1774 había conseguido todo lo que llevaba en mente.

Fray Juan Díaz:

“Día 22. Por la mañana salimos de este arroyo, y caminadas ocho leguas al west-noroeste, llegamos a la nueva misión del glorioso arcángel San Gabriel, administrada por los reverendos padres apostólicos del colegio de San Fernando de México, que dista cuarenta leguas de Monterey, según nos han informado”.

En 1774, Juan Bautista De Anza Bezerra Nieto fija el camino de Sonora a California, pasando por este valle (de Mexicali) con personas y animales rumbo a la Alta California y logrando la hazaña que habían buscado muchos al recorrer del 8 de enero al 22 de marzo de ese año, al llegar a la Misión de San Gabriel.

Al atardecer del 22 de marzo de ese año 1774, llegaron a la Misión de San Gabriel Arcángel, donde los sorprendidos frailes, Antonio Paterna y Antonio Cruzado hicieron sonar las campanas y a pesar de la penuria prepararon la mejor comida que tenían para compartirla todos y celebrar el encuentro.

VELICATÁ

El padre Fray Junípero Serra llegó a la frontera, en donde estaba formado el real (en el paraje que aquellos gentiles nombraban Velicatá), el Miércoles Santo, día 22 de marzo, encontrando ya allí al señor capitán Fernando Javier Rivera y Moncada (44), el cosmógrafo José Cañizares y a toda la gente pronta para la salida, y ya confesada por el misionero de San Borja, que con este fin había subido, para que el siguiente día Jueves Santo, cumpliesen todos (como lo hicieron) con el precepto de nuestra Santa Madre la Iglesia, y el Viernes Santo, 24 de marzo, saliese la expedición.

Por lo que el padre Juan Díaz concluyó este diario en esta Misión de San Gabriel en 8 días del mes de abril de 1774 años.

El capitán Juan Bautista de Anza regresó a San Gabriel el 1 de mayo de 1774 y prosiguió en el retorno con el padre Juan Díaz, que se había quedado a esperarlo, sumándose en Kuxily (Los Algodones) con el resto de los expedicionarios.

Llegó Fernando Javier Rivera y Moncada (49) a Loreto en marzo de 1774, y de allí cabalgó por cerca de 2,000 km. hasta Monterey, California, a donde arribó el 23 de mayo de 1774.

MISIÓN DE SANTO DOMINGO DE LA FRONTERA

La segunda misión de los dominicos fue fundada el 20 de agosto de 1775, con el nombre de Santo Domingo de la Frontera, por los padres Manuel García y Miguel Hidalgo, a poco más de 100 km al norte de la primera.

SEGUNDA EXPEDICIÓN

Después de los retrasos en Tubac, debido a las incursiones de Apaches que mermaba el palo, la expedición volvió a salir el 23 de octubre de 1775.

Partió de Tubac, Son., una segunda expedición, que llevaba un grupo considerable de colonos y 40 soldados, al mando de Juan Bautista de Anza (41) -ya ascendido a coronel-, el alférez José Joaquín Moraga (30), Fray Francisco Hermenegildo Garcés (37), fray Pedro Font, el sargento Pablo Grijalva y cien familias. En total, 243 personas (155 de ellos mujeres y niños), 340 caballos, 165 mulas, 302 vacas. Fray Padre Pedro Font fue seleccionado para acompañar a esta expedición, debido a su experiencia con la navegación, junto con un número de soldados, 28 de los cuales permanecen en el presidio una vez que se construyó en la región de San Francisco Bay. 

La Fuente diario escrito sigue siendo uno de los grandes documentos históricos de la época.  El grupo sufrió su única muerte por el camino la primera noche, cuando María Manuela Piñuelas murió de complicaciones después de su parto. Su hijo vivió.

Dos niños más, que nacieron por el camino, subió el número total de emigrantes a 198.

De estos, más de la mitad eran niños de doce años y menos.

FRANCISCO HERMENEGILDO GARCÉS

Fray Francisco Hermenegildo Garcés (37), 29 de octubre de 1775:

“Llegamos cerca de la ranchería de Quitoac (Quitobac), donde viven a tiempo algunos pápagos, y paramos más allá de un picacho, a quien los yndios (sic) llaman Tacca […].

Fray Francisco Hermenegildo Garcés registra, entrando el mes de noviembre, lo siguiente:

“1-10. Salimos de la laguna, y andadas quatro leguas al oest noruest, llegamos a la ranchería de San Juan Capistrano, donde nos recivieron como mil yndios formados en dos filas, los quales havían compuesto una grande ramada para hospedarnos, y delante de ellos havía fixado una cruz”.

FRAY LUIS JAYME

La Misión de San Diego de Alcalá fue atacada e incendiada por los aborígenes el 4 de noviembre de 1775, muriendo el padre Fray Luis Jayme (35), después de haber sido torturado.

OLLEYQUOTEQUIEBE

Se reunieron con Olleyquotequiebe (Salvador Palma) y el jefe de los Yuma (Quechan), y su tribu los yumanos el 27 de noviembre de 1775 y Fray Francisco Hermenegildo Garcés permaneció en el Río Colorado mientras el coronel Juan Bautista de Anza y su gente continuaron a San Gabriel.

Y es que, desde que Olleyquotequiebe (Salvador Carlos Antonio Palma, saludò por primera vez a los españoles, el 27 de noviembre de 1775, a orillas del Rio Colorado, les sirve de guìa para vadear las aguas turbulentas y escoltarlos por las rancherías indígenas ubicadas en lo que hoy es Arizona y Baja California, por lo que tanto el capitán Juan Bautista de Anza Bezerra Nieto como el padre Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, ven en este jefe indio un aliado a quien halagan con ropas y abalorios que, luego, el propio Olleyquotequiebe se vanagloria exhibiéndolos ante sus guerreros.

RÍO COLORADO

El 30 de noviembre de 1775 pasaron por el cruzadero del río Colorado.

El 4 de diciembre de 1775, dejando a los Padres Eixarcht y Francisco Hermenegildo Tomás Garcés detrás de ministrar a los nativos de Yuma, la expedición volvió a salir.

Después de veintinueve largas jornadas de fray Francisco Garcés, el 6 de diciembre de 1775, a su paso por lo que hoy es el Valle de Mexicali, donde menciona a los indígenas del lugar y los de la nación Jalchedum, que habitaban entre la nación Yuma hasta el puerto de San Diego, incluyendo, desde luego, la región de Tecate.

Después de vagabundear río abajo del Colorado; el 3 de enero de 1776, Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, arriba al Puerto de la Concepción, por la noche, en donde se reencuentra con el padre Juan Díaz, aunque omite mencionarlo por su nombre y se admira que los yndios yumas (quechans) hayan en su ausencia aprendido a cantar “alabanzas divinas”, aludiendo al cántico “Alabado”, que los franciscanos acostumbraban entonar al despertar de cada día.

El 24 de marzo de 1776, el padre Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, vuelve a reencontrarse con el resto de la comitiva en la Misión de San Gabriel, para subir a San Luis Obispo, cerca de los llanos de Tulare, en la Alta California.

EXCESOS

Fray Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, 12 de abril de 1776:

“Anoté los excesos de la soldadesca hispana, aunque sin atinar a una específica acusación de probables violaciones sexuales a las indígenas del rumbo.

FEATHER RIVER

En mayo 2 de 1776, Francisco Hermenegildo Tomás Garcés (46) anda próximo a la Sierra Nevada y en lo que ahora se conoce como Feather River (Río de Pluma) se dispone a cruzarlo.

LA PURÍSIMA

Y aún más, el domingo 12 de mayo de 1776, al regresar de San Francisco al poblado de La Purísima, Juan Bautista de Anza Bezerra Nieto (40), tal como le fue ordenado desde la Ciudad de México, se decidió llevar como visitantes invitados hasta la capital de la Nueva España a Salvador Palma, junto con tres acompañantes: un hermano suyo, al hijo del controvertido capitán Pablo y a un joven cajuenche como representantes de los indígenas del río Colorado, quienes habían pedido al Rey Carlos III , (en carta anterior del padre Francisco Hermenegildo Tomás Garcés, ser bautizados y que los españoles vinieran a vivir entre ellos, a lo que el monarca endosò su consentimiento anotando con su puño y letra: “con particular placer” y se giraron las pertinentes diligencias para llevarlos a la Ciudad de los Palacios; dicho en otras palabras; Palma y las tribus de esta región, en carta escrita por ellos, solicitaban una Misión y un Presidio entre los yumas e indígenas del bajo Colorado.

TEODORO FRANCISCO DE CROIX-HEUCHIN

Por decreto del 9 de marzo de 1780, Teodoro Francisco de Croix-Heuchin (50), dispuso la fundación de las misiones del Colorado; si bien el proyecto empezó su fragua desde un año antes por propia iniciativa de Fray Juan Díaz y Fray Francisco Hermenegildo Garcés.

RESTOS DE LA MISIÓN DE SAN VICENTE FERRER

Después de la fundación de la Misión de San Vicente Ferrer, el 27 de agosto de 1780, fray Luis de Sales le correspondió dirigir la colonización al adentrarse en el ámbito de la influencia kumiai.

San Xavier del Bac, Sonora.

Encomienda pastoral previa de fray Francisco Hermenegildo Tomás Garcés.

Posteriormente se trasladaría a La Purísima Concepción, donde el 19 de julio de 1781, perdería la vida a manos de los indios quechans (yumas).

Al romper el alba del 18 de julio, el padre Juan Antonio Joaquín Barreneche animó a aquellos de nosotros que aún estábamos vivos con las palabras:

“El diablo está del lado del enemigo, pero Dios está del nuestro”.

ALGODONES, Y YUMA

Los pueblos Algodones, B. C. y Yuma, Arizona fueron establecidos simultáneamente en 1780, y tuvieron una fugaz existencia de poco más de un año, pues el domingo 17 de julio de 1781), a las 10 de la mañana, y mientras se oficiaba misa, las pequeñas iglesias de adobe fueron asaltadas e incendiadas por los indios yumas, quienes asesinaron a los feligreses y sacerdotes, con excepción de las mujeres y niños.

Monumento al padre Francisco Hermenegildo Tomás Garcés , sacrificado por los indios quechans (yumas) el 19 de julio de 1781.

MARÍA ANA MONTIELO

En su carta, la señora María Ana Montielo, esposa del finado alférez Santiago Islas, refiere que los padres Francisco Hermenegildo Tomás Garcés (1738 – 1781) y Juan Antonio Joaquín Barreneche (1850-1781) fueron asesinados tres días después de iniciarse la masacre, hasta el 21 de julio de 1781, cuando fueron descubiertos por una vociferante turba revuelta de diferentes indígenas rebeldes, cuando estaban los frailes tomando chocolate en la cabaña de un indígena amigo.

FRAY JUAN DÍAZ

El 7 de diciembre de 1781, el capitán Pedro Tueros, Ensign Arvizu, 40 soldados presídiales y voluntarios guiados a Bicuñer por una mujer española rescatada, habitante del poblado estuvieron a las afueras, casi amaneciendo donde hallaron el cuerpo del padre Fray Juan Díaz, inmediatamente reconocido por su tonsura.

RESTOS

Después de buscar los restos de los padres Francisco Hermenegildo Tomás Garcés (1738–1781) y Juan Barreneche durante el lunes 10 de diciembre:

“Fue satisfactorio hallarlos sin deterioro, especialmente el cuerpo del padre Garcés”.

El 27 de agosto de 1784, muere en San Carlos Borromeo, Alta California, el religioso franciscano Junípero Serra; fundó la misión de San Fernando Velicatá (1769). Posteriormente estableció 9 misiones en la Alta California. 

Fue nombrado Presidente de las Misiones Californianas.

MISIÓN DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL DE LA FRONTERA

La Misión de San Miguel Arcángel de la Frontera fue fundada el 28 de marzo de 1787 por el padre Luis Sales.

Fray Luis de Sales (46) colaboró en el establecimiento de la misión dominica de Santo Tomás de Aquino fundada por el padre José Loriente el 24 de abril de 1791.

La Misión de San Pedro Mártir de Varona fue fundada el 17 de abril de 1794, a cincuenta kilómetros al Este de Santo Domingo de La Frontera, por el padre dominico José Loriente.

Fray Luis de Sales colaboró en el establecimiento de la misión dominica de Santo Tomás de Aquino fundada por el padre José Loriente el 24 de abril de 1791.

RESTOS DE LA MISIÓN DE SAN PEDRO MÁRTIR DE VARONA

La Misión de San Pedro Mártir de Varona fue fundada el 17 de abril de 1794, a cincuenta kilómetros al Este de Santo Domingo de La Frontera, por el padre dominico José Loriente.

El 27 de abril de 1794, se funda la Misión de San Pedro Mártir de Verona por el padre José Loriente.

El 31 de mayo de 1794, se abandona el primer sitio de la Misión de Santo Tomás y se funda el nuevo donde actualmente están sus ruinas.

MISIÓN DE SANTA CATARINA VIRGEN Y MÁRTIR

El 4 de agosto de 1797 se inicia la construcción de la Misión de Santa Catalina Virgen (nombrada así al principio), por el padre José Lorieta acompañado del Sargento Manuel Ruíz y algunos soldados.

El padre Miguel López llegó a la misión en 1797, al salir de ella el padre José Loriente y permaneció hasta el trece de enero de 1802, fecha en que fue asesinado.

BÁRBARA GANDIAGA

Así, el 17 de marzo de 1803 se inició un prolongado juicio contra Bárbara Gandiaga, Lázaro Rosales y Alejandro de la Cruz, entre otros, por el presunto asesinato de fray Eudaldo Surroca, y que muestra de entrada una contradicción bajo el esquema de la utopía misional planteada por fray Luis Sales (primera cita), pero sobre todo con la hipótesis académica de las misiones como sistemas de dominación opresivos y efectivos, que se fue construyendo en la academia con base en los testimonios liberales decimonónicos, principalmente de Manuel Clemente Rojo (1958, 1972, 1987, 1996 y 2000), y cuya influencia se percibe en los trabajos de Adrián Valadés (1974) y Pablo L. Martínez (2003).

LIBROS DE REGISTROS

Los libros de registros de las misiones aportan información importante, tenemos que, en la iglesia de San Diego, fray Fernando Martín bautizó el primero de noviembre de 1818 a la indígena María Francisca de 20 años siendo sus padrinos don Santiago Argüello, alférez del presidio y su esposa María del Pilar Ortega, los protagonistas de esta historia.

JUAN DE LOS SANTOS

El Libro de Defunciones (1775-1825) de la misma misión (San Diego de Alcalá), se registra el fallecimiento de Juan de los Santos el 6 de junio de 1820, número de partida 2961, originario de La Punta, ranchería de Tecate, sepultado en el cementerio de la misión de San Diego de Alcalá, da fe fray Fernando Martín.

JURA

El 22 de abril de 1822, los padres Fernando Martín y José Sánchez juraron la independencia en San Diego, entonces parte del territorio mexicano.

AGUSTÍN FERNÁNDEZ DE SAN VICENTE

Así, el 21 de junio de 1822, llegó a Loreto el comisionado imperial para las Californias, el prebendado de la catedral de Durango fray Agustín Fernández de San Vicente con el fin de adherir al nuevo régimen esta provincia y establecer los primeros gobiernos municipales.

FÉLIX CABALLERO

Atendiendo la orden de don Agustín de Iturbide y acompañado por dos indios de la tribu Pai Pai, el padre Fray Félix Caballero dejó la Misión de Santa Catalina (hoy próximo a Héroes de la Independencia en Sierra de Juárez) el 14 de abril de 1823.

CAPITÁN QUILMAY

Después de 6 días de marcha a lo largo del bordo sonorense del rio Colorado entre las rancherías Cucapah, el 20 de abril de 1823, el capitán Quilmay de esta nación propuso:

1) No acercarse más a los enemigos (Yumas); antes bien.

2) Descansar los animales en la ranchería Amat Cucapah (hoy La Grulla-Campamento- INSEN; el padre Francisco Eusebio Kino (1645 – 1711) le nombró San Félix de Valois), y

3) Continuar hacia la Sonora, doblando en su derecha ahora hacia el Este.

En 1823, el teniente coronel Antonio Pascual Narbona, primer gobernador de Sonora en el México independiente, ordena al ya capitán José Romero, comandante del Presidio de Tucson, a que encabece una nueva expedición a la Alta California, para regularizar la ruta postal, misión que acomete el 8 de junio, llevando como capellán del grupo al padre Félix Caballero y una escolta de 10 soldados, a través de la ruta recién abierta y nunca intentada oficialmente vía la boca del Colorado.

En 16 días del mes de marzo de 1824, en el cementerio de la iglesia de esta misión de San Diego, mi compañero Fray Vicente dio sepultura eclesiástica a una párvula llamada Casimira, hija de los gentiles, él llamado Ciguaricho, y de su mujer llamada Coayul, de la ranchería del Rosario, perteneciente a La Punta.

MISIONES SUBLEVADAS

“[…] el día 22 de [junio de 1824] llegó el correo y supe por él que las misiones sublevadas de la parte de arriba se hallaban pacíficas, a causa de que los indios dichos sublevados no hallaban asilo entre la gentilidad, escribió el principal cabeza de ellos al presidente implorando el perdón; y junto el presidente con el capitán don Pablo de la Portilla llegaron al paraje donde se hallaban arranchados, luego se presentaron todos entregando la mayor parte del robo; el padre presidente en beneficio dese mejor tensión cantó una misa con la mayor solemnidad” (AD-IIH, AHPLM, leg. 16, doc. 392. Énfasis añadido).

LIBRO DE CONFIRMACIONES

Por otra parte, el 5 de diciembre de 1832, en el Libro de Confirmaciones de la referida misión y según la lista de párvulos de gente de razón del Presidio de San Diego” el padre José Mariano Sosa, confirmó a Francisco, Ramón, Luis Antonio, Ignacio, José Antonio y María Antonia Argüello Ortega, hijos de Santiago Argüello y María del Pilar Ortega.

LIBRO DE BAUTIZOS

En el Libro de Bautizos de la Misión de San Diego de Alcalá (1771-1846), Fray Vicente Pascual Oliva registró en las partidas 6960, 6961, 6962, el 7 de agosto de 1840:

“En la iglesia bauticé y puse los santos óleos a las tres adultas …”, destacando la partida 6962, en cuyo margen izquierdo menciona a “Luisa, adulta de Tecate”, de 20 años,” llamada la gentila Capillai, de la ranchería de Tecate, Milcuatay.

FRAY FÉLIX CABALLERO

Según Agustín Janssens, el sueño del padre dominico Fray Félix Caballero era establecer un monasterio cerca de la bocana del Colorado, pero; murió el 30 de diciembre en la Misión de San Ignacio, Baja California, cuando en 1840 se dirigía a la Ciudad de México llevando la solicitud para pedir autorización; tal fue el gran esfuerzo e intención de tan valiosa gente.

HENRY STANTON BURTON

Moviendo sus tropas a Todos Santos, Henry S. Burton capturó al padre presidente dominico fray Gabriel González, y el capitán Henry Morris Naglee ordenó que otros dos presos fueran pasados por las armas el 30 de marzo de 1848.

El 12 de abril de 1848, las tropas extranjeras volvieron a ocupar La Paz con Mauricio Castro Cota, el capitán Manuel Pineda y el padre presidente dominico fray Gabriel González despachados a Mazatlán.

COLONIA MILITAR

Para 1851 había en la Colonia Militar casi 200 colonos, lo que se habla de cierto progreso en la actividad agropecuaria que era la única de tipo productivo, y según censo elaborado por el sargento Anastasio Ramírez del 29 de junio, la colonia tenía 20 militares, el padre José María Suárez del Real, el sacristán Catarino Real, 13 familias mestizas, 73 indios; habían dos soldados españoles; el alcalde Thomas Warner, inglés; y un italiano y un francés dedicados al comercio.

FAMILIA ARGÜELLO

Otra noticia sobre la familia Argüello que encontramos en los libros eclesiásticos es el registro del padre misionero apostólico J. Chrisostom Holbein de la siguiente acta:

“El día 8 de julio de 1851, en el cementerio de este pueblo di sepultura eclesiástica a Josefa Zamorano, soltera, de edad de 16 años, recibió los santos sacramentos en el rancho de la Tía Juana.” 

María Josefa Zamorano era hija de Agustín Zamorano y de María Luisa Argüello [hija de don Santiago] quien vivía en San Diego y pasaba temporadas en su rancho de Tijuana. 

En 1856 arribó al Partido Norte el padre francés Henry J. A. Alric.

En el Libro de Matrimonios de la Misión de San Diego aparece solo un matrimonio efectuado en el Cerro Colorado por el padre Antonio D. Ubach (40) entre Antonio García Valenzuela y Juana Murillo Armas el 5 de mayo de 1875.

MODESTO SÁNCHEZ MEYÓN

Modesto Sánchez Meyón fue ordenado sacerdote el día 19 de septiembre de 1925, y a la vez, el sueño de doña Leandrita fue cristalizado.

En Atengo, el padre Modesto Sánchez Meyón ofició su primera misa “cantada” el 7 de octubre de 1925.

El deber como siervo del Señor llamaba al padre Modesto Sánchez Meyón (28) a Baja California Sur.

En compañía de su mamá y hermanos, arribó a Santa Rosalía el día 8 de diciembre de 1925, donde aprovechó la estancia para celebrar su primera misa en la península.

El padre Modesto Sánchez Meyón fundó el 8 de diciembre de 1939, el Seminario Misional de Nuestra Señora de la Paz en Ensenada.

ESTACION MISIONAL DE SANTA MARÍA DE TECATE

Sacerdotes que han prestado su servicio pastoral a las iglesias que dieron origen a la evangelización en la Estacion Misional de Santa María de Tecate y Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe: Felipe de Jesús Torres Hurtado, primer jefe de la Estacion Misional. Modesto Sánchez Meyón, del 20 de marzo de 1941 al 20 de julio de 1947.

Durante su estancia en Tecate, el padre Modesto Sánchez Meyón fundó la Estación Misional “Santa María” de Tecate, el 15 de agosto de 1941 y participó en la compañía de Monseñor Felipe de Jesús Torres Hurtado, en la fundación también del pequeño templo católico de Valle Redondo.

COLEGIO “JUAN MARÍA SALVATIERRA”

También el padre Modesto Sánchez Meyón se ocupó, entre otras cosas, de fundar el Colegio “Juan María Salvatierra”, el día 19 de julio de 1945, atendido por el grupo de religiosas “Misioneras Hijas de la Purísima Virgen María” integrado por las hermanas:

María Lourdes Félix Balderrama,

Felícitas Montes,

María Victoria Navar,

Consuelo Ocampo y

Francisca Vivanco

quienes con la participación de la señora Leandra Mayón Vda. de Sánchez y Carmen Romo, formaron el cuerpo de docentes de la institución.

José Guadalupe Álvarez del 26 de julio de 1947 al 16 de diciembre de 1947.

José Doroteo Marín 21 de diciembre de 1947 al 1 de enero de 1951.

José Guadalupe Álvarez del 6 de enero de 1951 al 26 de agosto de 1951.

José Socorro Pérez del 30 de agosto de 1951 al 23 de abril de 1961.

Tomas Álvarez del 23 de abril de 1961 al 12 de noviembre de 1966.

Albino Mendoza del 12 de noviembre de 1966 al mes de noviembre de 1968.

Arturo Reyes del mes de noviembre de 1968 al mes de noviembre de 1977.

VICARIOS O DIÁCONOS

Estuvieron como vicarios o diáconos en el lapso de 10 años los sacerdotes José Luis Aceves, José Fernández, Porfirio Álvarez, Rómulo Cendejas, diacono Julián Rubalcaba, Manuel Valladolid, Ezequiel Jiménez, Carlos Mayorga y Felipe de la Torre.

Rafael Magaña, del 8 de junio de 1978 al 10 de agosto de 1980.

Estuvieron como vicarios los padres: José Pacifico, y Ángel López Betancourt.

Tomás Guzmán, del 16 de enero de 1983 al 19 de agosto de 1984.

Como Vicario estuvo Vicente Leal.

Felipe Hernández Lugo del 17 de septiembre de 1987 al 19 de mayo de 1989.

Como vicarios estuvieron Roben García, José María Larios e Ignacio Cortes.

José Barajas del 19 de mayo de 1989 al 22 de abril de 1992.

Como vicarios estuvieron Kevin Foote y Carlos Reyes.

El 30 de enero de 1999, se funda en Tijuana el Desayunador Salesiano “Padre Chava”, alimentando diariamente a migrantes.

Eduardo Martínez del 22 de abril de 1992 al 26 de noviembre de 1999.

Como vicarios estuvieron los sacerdotes Rubén García, Gabriel Pedroza, Carlos Poma y Lino Márquez.

Ángel López Betancort del 26 de noviembre de 1999 al 31 de agosto del 2006.

En este periodo colaboraron como vicarios los sacerdotes: Lino Márquez, José Luis Zavala, Carlos Francisco Castillo, Arturo Rangel, José María Larios y Juan Manuel Mora Flores.

FIESTAS PATRONALES

Para cerrar la semana, el domingo 10 de junio del 2018 se estarán celebrando las Fiestas Patronales de la Parroquia “Padre Nuestro”, localizada en el Fraccionamiento “Lomas de Santa Anita”, iniciando con una cabalgata que partirá del Convento de las Madres Brígidas en Nueva Colonia Hindú hasta llegar a la parroquia.

El padre Francisco Landa, párroco de la Iglesia de Guadalupe comentó que previo a la Romería Guadalupana de Verano 2019 comenzarán con una serie de eventos culturales del 17 al 21 de junio.

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-

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