PROCURADOR O PROTECTOR UNIVERSAL DE TODOS LOS INDIOS DE LAS INDIAS HISPÁNICAS
En 1514, Bartolomé de las Casas (30), renunció públicamente a los repartimientos y encomiendas de indios que había explotado, y desde entonces se dedicó a defenderlos, por tal razón se le conoce como el principal defensor de los indígenas y fue nombrado «Procurador o protector universal de todos los indios de las Indias» hispánicas.
EN LA CONQUISTA
Las huestes de Hernán Cortés (34) y sus aliados indígenas: Cempoaltecas y tlaxcaltecas, llegan, desde Ixtapalapa, a la calzada de entrada a la Gran Tenochtitlan.
A la entrada de la ciudad, realizada el 8 de noviembre de 1519, se produjo el encuentro de Moctezuma Xocoyotzin (53) y Cortés, haciendo de intérprete doña Marina.
Moctezuma II creyó que los españoles eran enviados del dios que vendría del Este -este es Quetzalcóatl y Serpiente Emplumada- y fue un espléndido anfitrión de éstos, obsequiándole entre otras cosas, el Tocado del Dios Quetzalcóatl, mejor conocido como Penacho de Moctezuma y el cual, fue enviado junto con otros presentes a la Corte Imperial.
Dado que Carlos V (19) era un austriaco -casa de los Habsburgo- al extinguirse la rama española, este regalo terminó en Austria.
Cortés y sus capitanes son recibidos por Moctezuma II y los grandes señores aztecas (En lo que hoy es conocida como Calzada de San Antonio Abad).
Los españoles son alojados en el Palacio de Axayácatl (Situado donde hoy se encuentra el edificio del Nacional Monte de Piedad).
PROHIBICIÓN
La reina gobernadora, doña Isabel de Portugal (28) firmaba en Ocaña el 4 de abril de 1531, la Real Cédula dirigida a los oficiales de la ciudad de Sevilla, residentes en la Casa de Contratación de las Indias, en la cual prohibía terminantemente el paso a las tierras recién conquistadas de “Romanceros” y de “Historias vanas e de profanidad, como son el “Amadís e otras desta calidad”, por ser su lectura harto perjudicial a los indios, apenas conversos, y que, por lo mismo, no debían distraerse con las falsedades que tales romances y libros narraban, sino ocuparse sólo de las cosas de religión.
RECONOCIMIENTO
Para el año 1537 el papa Paulo III dicta la bula “Sublimis Deus” donde proclama que los indios no pueden ser esclavizados y que no debían ser tratados como «Brutos creados para vuestro servicio, sino como verdaderos hombres, capaces de entender la fe católica. Tales indios y todos los que más tarde se descubran por los cristianos, no pueden ser privados de su libertad por medio alguno, ni de sus propiedades, aunque no estén en la fe de Jesucristo y no serán esclavos».
El 26 de agosto de 1540, el explorador español Hernando de Alarcón (40), llega a la desembocadura del Colorado y bautiza el río con el nombre de Nuestra Señora de la Buena Guía. Surge el 1er. encuentro con indígenas (Posiblemente cucapás).
MONARCA MAGNÁNINO
Se concertaron las capitulaciones, que fueron aprobadas por el rey Felipe II de España, llamado «El Prudente» (64). Los tlaxcaltecas que iban al norte serían considerados como caballeros e hidalgos, antepondrían a su nombre el título de “Don”; asimismo, podrían montar a caballo y usar armas, estarían exentos de tributos y servicio personal, establecerían sus poblaciones separadas de los españoles, los pueblos tendrían ayuntamiento propio, con exclusión de otros indios y españoles, se les darían aperos de labranza, etc. Estas capitulaciones se publicaron en México, el 14 de marzo de 1591.
Por real cédula del 11 de junio de 1594, Felipe II (67), rey de España, se prohíbe a los funcionarios de la Nueva España que encarcelen a los indígenas.
EL MISIONERO INFATIGABLE
Después de fondearse en la bahía el primero de abril de 1683, Isidro Antondo y Antillón y fray Eusebio Francisco Kino (38), entraron caminando al sur, hasta la boca del puerto de La Paz; y algunos saltaron a tierra, y hallaron un lindísimo ojo de agua, muchísima leña, un carrizal, rastros de indígenas, etc. La rebautizó con el nombre de Islas Carolinas, en honor de Carlos II (22), Rey de España
“En 25 de abril de 1684, Día de San Marcos. Saqué y enseñé a los indios unas cuantas láminas y estampas o imágenes de la vida, pasión y resurrección de Nuestro Señor; y de otros animales y pájaros, y gustaron mucho de verlas y nosotros muchísimo de ver la docilidad con que aquellas imágenes -que las colgué alrededor de mi aposento- aprendìan a conocer y decir, así en castellano como en su lengua, cual era Nuestra Señora, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; el Santo Niño, San José, Santa María Magdalena, el Santo Cristo, los Santos Apóstoles, etc.”.
Eusebio Francisco Kino
Una cédula real del 22 de diciembre de 1685 ordenó la suspensión de actividades en las Californias debido a los altos gastos de la hacienda real causados por la rebelión de los indios pueblo de Nuevo México y las sublevaciones de los seris en Sonora y tepehuanes en Durango, y por ello el viceprovincial de la Compañía de Jesús, Daniel Ángelo Marras, no pudo continuar la gobernación temporal de California.
MISIONERO VISIONARIO
Después de dos meses de espera el padre Juan María Salvatierra (49) decide salir el 10 de octubre de 1697, acompañándolo tres indios, un cabo y cinco soldados.
El padre Juan María Salvatierra (49) comenzó a edificar la primera misión en Loreto el 20 de octubre de 1697; a esa misión se agruparon los primeros indígenas convertidos, quienes formaron rápidamente una aldea que vino a ser después la capital de Baja California y donde residió el gobierno hasta 1820, época en que la ciudad naciente de La Paz vino a ser la residencia del gobierno y la capital de la Península.
EXPULSIÓN DE LOS JESUITAS
Cerca de dos siglos llevaban los misioneros jesuitas en la Nueva Vizcaya y alrededor de uno en la Alta y Baja Tarahumara, administrando los pueblos de indios en que estaban organizadas las misiones fundadas por ellos mismos, cuando se recibió en México la real orden de 27 de febrero de 1767, expedida en El Pardo por el rey Carlos III llamado «el Político» o «el Mejor Alcalde de Madrid» (51), disponiendo que fueran expulsados de España y sus dominios todos los individuos de la Compañía de Jesús, así religiosos como coadjutores y legos.
Fray Junípero Serra (56) fundó la Misión de San Diego de Alcalá, el 16 de julio de 1769, en la entonces llamada Alta California y los frailes franciscanos tuvieron por primera vez contacto permanente con los indígenas de la demarcación que hoy ocupa la ciudad de Tecate.
Para confirmar su hipótesis, el padre Eusebio Francisco Kino (51), necesitaba de sus indios y por eso convocó en San Xavier del Bac a una junta el 26 de abril de 1700.
En el “Domingo de Ramos”, 20 de marzo de 1701, los padres Eusebio Francisco Kino (56) y Juan María de Salvatierra y Visconti (53), queriendo conocer toda la región en que destinaban sus empeños, se encaminaron hacia el río Colorado acompañados de 10 soldados y algunos indios; fueron por el camino pegado a la costa del mar de Cortés; pasaron hacia el poniente sobre los medanales al sur de los picos del volcán de Santa Clara (el Pinacate).
DOMINICOS Y FRANCISCANOS
El 8 de abril de 1770, los frailes dominicos obtuvieron permiso del rey de España para evangelizar a los indígenas de la península, por lo que el territorio se dividió entre las dos órdenes religiosas.
Los franciscanos se quedaron en la Alta California y los dominicos en la península o Baja California.
Veamos la versión de Juan Díaz de la primera expedición a Monterey: “Día 9 de enero de este año de 1774, a las ocho de la mañana, se comenzó la jornada tomando el rumbo sur-sudoeste y caminadas ocho leguas, a las seis de la tarde, llegamos al sitio de la Aribaca, poblado antiguamente por los españoles hasta el año de 1751, en el que se despobló por la sublevación de los indios pimas, que en dicho año quitaron la vida a muchos de los habitadores”.
FRAY FRANCISCO HERMENEGILDO TOMÁS GARCÉS
Fray Francisco Hermenegildo Tomás Garcés (46), 12 de abril de 1776: “Anoté los excesos de la soldadesca hispana, aunque sin atinar a una específica acusación de probables violaciones sexuales a las indígenas del rumbo”.
Desde Nuevo México y en las proximidades de Acoma y Santa Fe, el misionero explorador Francisco Hermenegildo Tomás Garcés (46) emprende el regreso al Río Colorado (Territorio yuma), en cuyo recorrido da cuenta, el día 25 de Julio 1776, de su caminar ya en Arizona con los jamajabs (Indios mojaves o mohaves).
INDÍGENAS CUCAPÁS
Ambos pueblos (Los Algodones y Yuma) fueron establecidos simultáneamente en 1780, y tuvieron una fugaz existencia de poco más de un año, pues el domingo 17 de julio de 1781, a las 10 de la mañana, y mientras se oficiaba misa, las pequeñas iglesias de adobe fueron asaltadas e incendiadas por los indios yumas, quienes asesinaron a los feligreses y sacerdotes, con excepción de las mujeres y niños.
Hacia el 6 de julio de 1783, en ambos sitios (Caminos antiguo y nuevo) se asentaban indígenas hostiles hacia los españoles.
El 14 de abril de 1785, el capitán Pedro Fagés y algunos soldados llegan a Cerro Prieto, en el Valle de Mexicali, estableciendo contacto con indígenas cucapás.
Atendiendo la orden de don Agustín de Iturbide (40) y acompañado por dos indios de la tribu Pai Pai, el padre Fray Félix Caballero dejó la Misión de Santa Catalina (Hoy próximo a Héroes de la Independencia en Sierra de Juárez) un 14 de abril de 1823.
El 25 de julio de 1826, el Gobernador de las Californias, José María de Echeandía, libera del tutelaje de las misiones a todos los indígenas.
Un decreto del 8 de julio de 1841 permitió la retención de las iglesias de las misiones, sus huertas y escuelas; pero los demás terrenos deberían distribuirse entre los indígenas.
COLONIAS MILITARES
El 19 de julio de 1848, el general José Joaquín de Herrera (56), presidente de la República, dispone la creación de 18 colonias militares a lo largo de la nueva frontera para resguardar el territorio de frecuentes incursiones de aventureros norteamericanos e indígenas alzados, y al mismo tiempo, poblar los vastos territorios del norte, no sólo por civiles sino por los soldados que llevarían a sus familias.
En vista del peligro al que se enfrentaban al desafiar a los indígenas que se resistían a ser desposeídos de sus tierras, el gobierno de los Estados Unidos estableció el Fuerte Yuma el 17 de noviembre de 1850.
COLONIA AGRÍCOLA DE TECATE
Blas Balcárcel (36), secretario de Fomento del gabinete de Sebastián Lerdo de Tejada y Corral (38), procuró que la ley del 14 de marzo de 1861, expedida por Benito Juárez (54) y que diera origen a la formación de la Colonia Agrícola de Tecate, protegiera a los indígenas de la zona, ya que éstos podrían sufrir abusos de las familias que llegaran a colonizar.
El 5 de agosto de 1876, se comunican los graves acontecimientos de La Frontera de indios de las rancherías Jacumé, San Valentín, San José, Las Juntas, Nejì y Mezquite Pobre, se habían sublevado lanzado una partida de sesenta hombres armados a la casa del Juez Local de Tecate para sustraer por la fuerza unos tres indios que allí se hallaban detenidos con el fin de levantar la sumaria información tocante al plagio y muerte de un hombre blanco, entregado premeditadamente por los mismos salvajes a los norteamericanos que residían en Milcuatay.
En varios casos, el 11 de septiembre de 1877, se mencionó a los indígenas, sin especificar un grupo en concreto.
El 6 de julio de 1878, había que señalar dos cosas: Primero, la belicosidad de los indígenas de Tecate; y segundo que Tecate tena ya su Juez de Paz, lo que implica que había aumentado su población.
Los propietarios con títulos fundadores de Tecate fueron, por lo tanto: José de Gracia Félix, Jesús Demara, Jesús Félix, Ambrosio González, Teófilo Noris, Juan de Dios Ortega, Pablo Ortega y Valdez, Pedro Ortega, Ramón Sánchez, Jesús Valencia, Joaquín Verdugo y Josefa de Villagrana, en quienes está la sangre y raíz fundadora de esta ciudad, sin olvidar, desde luego, a los indígenas de la región y a quienes les antecedieron en la colonización.
Esto se corrobora con otro documento de 1877, donde se menciona que se estableció “La Escuela de Tecate”.
El 29 de noviembre de 1900, el Juez de Paz del Poblado de Los Algodones, envió un oficio al Jefe Político y Militar, Agustín Sanginés, en que manifestó haber levantado un acta “Con motivo de haberse presentado hoy el capitán indígena Señac Van, alias “El Flaco”, acompañado de más de 200 indígenas yuma y Dieguinos”, el mencionado capitán manifestó: La “Compañía de Irrigación y Terrenos de la Baja California” ha emprendido algunos trabajos en los terrenos que ellos están cultivando, y que temiendo un despojo solicitan que el gobierno las mande fraccionar y se les ceda”.
Ángela (indígena sin apellido), falleció el 5 de diciembre de 1903 en Tecate, B. C., a la edad de 24 años, mexicana, hija del finado Simón y María Eusebia (indígenas sin apellido). Causa de su muerte: Tisis. (Registrado en Ensenada, el 18 de noviembre de 1903) (D-03-91).
En octubre de 1904, luego de que la primera empresa pidiera que desalojaran la zona, el coronel Celso Vega se trasladó a Mexicali y tranquilizó a los rancheros e indígenas, que, según su propio decir, estaban muy alterados.
1911
El ejército del coronel Celso Vega estaba compuesto por unos cuantos soldados mexicanos regulares, muchos “Voluntarios” de leva, y algunos guías indios.
Jesús González Monroy: Por aquella misma fecha (10 de marzo) arribó un grupo de indios cucapás, procedentes de la sierra de Guerrero (El autor confunde el nombre) venía presidido por un indio viejo e impedido.
Después de partir con el general José María Leyva hacia la Laguna Salada el 15 de marzo, la heterogénea colección de mexicanos, indisciplinados exploradores indígenas y aguerridos miembros de la IWW, avanzó hacia el sur con un ánimo amenazante.
El 16 de marzo, se realizó un combate entre alrededor de setenta hombres del octavo batallón de infantería, al mando de Justino Mendieta -con la ayuda de rancheros voluntarios e indígenas de la zona- en contra de los hombres de Luis Rodríguez y su grupo, quienes se habían apoderado de Tecate días atrás.
Entre los indígenas se destacó a otro dirigente con el nombre de Carlos.
El 8 de mayo de 1911, treinta y tantos indios al mando de Juan Guerrero tomaron el puerto de San Quintín, que casi habían capturado en abril.
El 25 de mayo, simultáneamente, un directivo de la Junta explicó que, tan pronto como los liberales tuvieran el control completo, las ricas tierras de los extranjeros serían expropiadas a nombre de los indios de Baja California y, según mejorara la suerte de los magonistas, en el resto de México también.
Posteriormente, los hombres de Emilio Guerrero continuaron su camino hasta Tijuana, a donde llegaron el 28 de mayo, sitio en el que desempeñaron un papel muy importante en los acontecimientos de los siguientes días, lo que demuestra las diversas tendencias que había en el grupo insurgente y que terminaron enfrentando a los indios y mexicanos del grupo de Guerrero con los extranjeros del contingente armado.
Los indígenas no solicitaron salario ni recompensa de ninguna clase, sin embargo, el coronel Celso Vega se negó a entregar armamento a los indígenas, quienes esperaron a las afueras del poblado sin obtener respuesta afirmativa, detalle que se volvió en contra de Vega, ya que fue un elemento más que se sumó a las acusaciones de que estaba de acuerdo con Simón Berthold Chacón.
Otro grupo de indígenas Cucapá, alrededor de 30, se sumó a los hombres que permanecieron en Mexicali. Éstos, en su mayoría, se unieron a Rodolfo L. Gallego cuando se declaró maderista el 8 de junio.
El 10 de junio, el grupo de Lerdo González Romo (39) se encontró con varios indios a quienes se consideraba aliados de los revolucionarios.
Pelearon y once de ellos fueron asesinados, sin haberse hecho el menor esfuerzo por determinar si era o no rebeldes.
El 22 de junio, 155 wobblies y aventureros extranjeros, en su mayoría estadounidenses, y 75 mexicanos e indios, estaban listos para la segunda batalla de Tijuana.
“Los Angeles Examiner”, 15 de octubre de 1911: “Se cree que la misión de Emilio Guerrero resultará en la restauración de miles de acres de tierra a lo largo de la península de Baja California, de la cual los indios fueron despojados desde hace más de medio siglo”.
El 15 de octubre de 1911, Emilio Guerrero y sus compañeros cucapás se fueron con los revolucionarios nativos; pelearon, no para saquear, sino por su libertad.
VÍA FERROVIARIA
El 2 de julio de 1914, el mayordomo era R. E. Kesse, quien era el encargado de la construcción; los campamentos de trabajadores se establecían conforme la vía avanzaba; los trabajadores formaban cuadrillas para dividirse el trabajo; había chinos, hindúes, griegos, así como mexicanos e indígenas.
MUSEO COMUNITARIO
El 31 de agosto de 1991, es inaugurado el Museo Comunitario del Valle de Guadalupe, para rescatar la historia de la antigua Colonia Rusa, así como la de los indígenas Kumiais.
MASACRE
El 22 de diciembre de 1997, un grupo militar atacó a indígenas tzotziles del poblado de Acteal, en el municipio de Chenalhó en Chiapas, cuando se encontraban dentro de una iglesia.
BASTÓN DE MANDO
Los pueblos originarios, con sus músicas y danzas tradicionales, arroparon a Andrés Manuel López Obrador en el zócalo capitalino el 1 de diciembre del 2018, cuando le fue entregado el Bastón de Mando.
Por el Profr. José Luis Bobadilla Acosta, Taller de Historia de Tecate, A.C.