Por el Psic. Felipe de Jesús Aguilera Calleros.

Recientemente hablamos sobre cómo el amor va cambiando, refiriéndonos al amor que sentimos hacia otra persona, pero no hablamos del amor hacia la persona más importante de nuestra vida, nosotros mismos.

Parte imprescindible de nuestra personalidad es el amor que nos tenemos a nosotros mismos, y se relaciona indiscutiblemente con el cómo nos desenvolvemos en la vida en cada una de sus áreas, sentimental, familia, laboral, etc.

No podemos negar que a manera de sinónimo podríamos considerar la palabra autoestima como amor propio, ya que ambas palabras nos dicen algo sobre lo que pensamos y sentimos de nosotros mismos.

Cuando nosotros carecemos de amor hacia nuestra persona, despierta en nuestra mente pensamientos que nos harán sentir que valemos muy poco, y con estas ideas en la cabeza se crearán conductas que de la misma manera nos afectarán, de esa manera y como si fuera un círculo, las conductas potenciarán nuestras ideas y viceversa.

Lógicamente el tener un adecuado equilibrio, o elevado amor propio, nos llevará a ideas más positivas y a su vez a ser activos en forma positiva. Logrando con el resultado reafirmar nuestra positiva auto valoración.

“Para quererme tengo que aceptarme, para aceptarme tengo que conocerme, para conocerme tengo que importarme”

Con el simple hecho de leer estas líneas, has demostrado a ti mismo el interés que tienes en tu persona, y ya sea que tengas poco, o mucho, amor propio, los siguientes consejos te serán de ayuda para impulsar aún más ese sentimiento:

Una persona que se quiere así misma sabe lo que desea, lo que siente y lo que piensa, teniendo esta conciencia trabaja en pro de atender sus necesidades, una persona que se quiere así misma no puede permitirse el descuidarse constantemente, y cumplir siempre tus deseos no significa tal vez la opción más saludable o beneficiosa.

Por ejemplo, el realizar actividades saludables que promuevan un mejor estado de salud, cuidar de la alimentación, cuidar de la calidad nuestras relaciones personales, etc. Cuidarte a ti mismo no tiene por qué ser considerado como un acto egoísta, si no como una práctica de bienestar.

Es importante buscar un propósito, una meta. Para vivir una vida equilibrada, saludable, debes actuar y tomar decisiones que te encaminen a ese objetivo, de esa forma una vez cumplido te sentirás bien contigo mismo. Claro que debes plantearte objetivos a corto y mediano plazo, en la sumatoria de esos pequeños logros encontrarás más sensaciones de bienestar.

“Antes de amar a alguien, debes amarte a ti mismo, pues no puedes amar más a otro de lo que te amas a ti mismo”.

¡Nos vemos en la próxima publicación!

 *LAS OPINIONES DEL AUTOR NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA*

0 Comments

Leave a Comment

Síguenos

GOOGLE PLUS

PINTEREST

FLICKR

INSTAGRAM

Síguenos

Etiquetas