Por: Psic. Felipe Aguilera Calleros.

El Trastorno por Estrés Agudo podemos describirlo como una reacción “normal”, o esperable, a una situación de gran estrés, cuando nos vemos superados por alguna sucesión de eventos que nos hayan ocurrido o se hayan presentado cerca de nosotros (convirtiéndonos en testigos). También puede ser ocasionado por eventos que han llegado a nosotros de forma aún más indirecta, por ejemplo al enterarnos de algo que le haya sucedido a algún familiar, o amigo cercano. 

Los síntomas de este trastorno son:

Quien sufre de TEA puede presentar dificultades para conciliar el sueño o mantenerlo durante el transcurso de la noche (insomnio), la persona puede verse irritable y/o tener reacciones de forma exagerada.

De lograr dormir se pueden tener sueños en donde se vuelve a experimentar el suceso traumático por medio de pesadillas, o bien traerlos a la memoria estando despiertos y revivir las sensaciones de esa desagradable experiencia.

Sentimientos de incapacidad de poder seguir con nuestra vida habitual, pues contantemente pensamos o actuamos, evitando lugares o personas que nos recuerdan lo ocurrido.

Sufrimos pues toda actividad nos representa un mayor reto, dejamos de lado actividades que eran parte del común de nuestras vidas/días.

Como decíamos en un inicio, el Trastorno por Estrés Agudo, son una serie de respuestas esperables, por lo cual realmente esta condición la ha experimentado la gran mayoría de la población. Todos pasamos en algún momento por la pérdida de un trabajo, por una separación o fallecimiento, hemos sido víctimas o testigos de un delito, etc.

Pero es importante señalar que este trastorno va solo de paso en nuestras vidas, o por lo menos así debería de ser, dependiendo de las herramientas y apoyo a los que podamos acudir al afrontar una situación complicada, caso contrario puede llegar a diagnosticarse un Trastorno de Estrés Postraumático si los síntomas duran más de 4 semanas. Claro esto con la evaluación de un experto.

¿Qué debería hacer una persona que padece el TEA?

Aparte de buscar el apoyo externo, también es importante el cuidado personal.

Cuando un evento ya se ha presentado, por ejemplo un incendio que fue controlado, es más sencillo para la persona lograr en sentimiento de seguridad personal. Sin embargo, cuando el evento está en transcurso, por ejemplo la actual pandemia, la tarea se dificulta y en estos casos, se debe buscar la guía y recomendaciones de personas expertas para aprender cómo es que tanto la persona como sus familiares pueden estar lo más seguros posible.

Se deben mantener horarios saludables para el descanso y la toma de alimentos, cuando atravesamos circunstancias muy difíciles en nuestra vida puede que no tengamos hambre, o que no podamos dormir, pero debemos procurar hacerlo hasta lograr una estabilidad nuevamente. Todo esto con la finalidad de procurar nuestra salud física.

Mantenernos enfocados en procurar nuestra mejoría. Buscar pasatiempos y mejor aún cuando éstos nos acercan a la familia, nos ayudarán a alejar la sensación de aburrimiento o aislamiento.

Leer nos puede ayudar a distraernos un poco y alejar la atención del evento traumático, lo cual nos permitirá descansar y bajar los niveles de estrés. Mirar una película divertida o un monólogo de chistes nos hará reír, y aliviar un poco nuestro estado emocional que debido a la actual situación suele estar inmerso en la tristeza o melancolía.

“La vida es un 10% de lo que nos ocurre, y un 90% cómo reaccionamos a ello.”

¡Nos leemos en la próxima publicación!

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-