Por el Psic. Felipe Aguilera Calleros

¿Recuerdas a aquellas profesoras, y profesores, que te dejaron importantes enseñanzas de vida? Les comparto que yo sí, muchos de ellos viven en este mismo pueblo de Tecate, algunos siguen estando por lo menos en mi memoria y se les recuerda con afecto, incluso algunos son parte de mi familia,  con respeto y admiración va para ellos el presente escrito.

¿Un profesor es solamente alguien parado frente a un grupo? Si nos detenemos a pensar va más allá de eso, los profesores son una marcada influencia, y dejan huella en el desarrollo cognitivo, emocional y el futuro profesional de sus alumnos.

Todos sabemos que sea cual sea nuestro nivel académico, la figura del profesor es pieza fundamental, no es que sea imposible el autoaprendizaje, pero quien te guíe siempre será una pieza invaluable.

Tal vez de pequeños no lo veíamos de esa forma, pensábamos que los excelentes profesores eran solo “buena onda”, y nos daban dolores de cabeza aquellos con los que no congeniábamos del todo. Sin embargo, con el pasar de los años toda nuestra historia en las aulas se recuerda con añoranza.

Un profesor es esa persona que dedica su vida, y se actualiza contantemente para formar e incluso proteger a nuestras hijas e hijos, mientras se encuentran en las aulas. Recuerdo claramente esos días de inicio de clases en los primeros niveles de educación básica: Algunos infantes convertidos en un mar de lágrimas y también, seamos honestos, algunos de sus padres.

Pero ahí están listos profesoras, profesores, educadoras y educadores para recibirnos y apaciguar esa “sensación de abandono” con unas simples pero importantes palabras. Sin darnos cuenta, nos han ayudado a subir un escalón más en nuestro desarrollo y autonomía.

También en muchas ocasiones los primeros en detectar dificultades físicas, emocionales o cognitivas en los menores son los maestros frente a grupo. Le ganan a mamá, a papá y al doctor también, en detectar por ejemplo: Problemas en la vista y de ser necesario son los primeros en solicitar el apoyo y auxilio, de un menor en problemas.

A lo largo de nuestro recorrido por primaria, secundaria, preparatoria y universidad (porque independientemente de nuestra edad), ellos son los facilitadores de nuestro aprendizaje y desarrollo. Ellos nos permiten acercarnos cada vez más a nuestros sueños y maximizar nuestras capacidades.

Y en un abrir y cerrar de ojos, es otro profesor el que mueve la borla de un lado del birrete a otro, y te dice que “estás listo para ejercer tu profesión”, por lo que luchaste tantos años, apoyado por tu familia, amigos, seres queridos y todo ese equipo de profesores que te formaron año con año.

Profesoras y profesores, tienen una labor compleja y nuevos retos en la actualidad; aún así el simple hecho de trabajar con decenas, centenas, o tal vez miles de personas en desarrollo, tomando en cuenta que cada uno de esos alumnos es único, nos habla del extraordinario papel que tiene cada profesor en las vidas de sus alumnos.

“Un niño, un profesor, un lápiz y una libreta pueden cambiar el mundo”

Madres de familia, padres de familia, tutores de jóvenes estudiantes, trabajemos en equipo con nuestros profesores.

¡Nos vemos en la próxima publicación!

-LAS OPINIONES DEL AUTOR, NO REFLEJAN LAS DE LA EMPRESA-